Los amantes coruñeses del Súper-8 coruñés se suman el sábado a la conmemoración mundial del medio siglo de vida de este formato de cine. A las proyecciones simultáneas del Global Super8 Day en Nueva York, Los Ángeles, Londres, Tokio y otras capitales, se suma la programada en el Sporting Club Casino, a partir de las cinco de la tarde, de forma completamente gratuita. El productor y miembro de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, Ignacio Benedeti, es el organizador de esta jornada, con tres sesiones para todos los públicos.

La primera de las proyecciones, anunciada para las cinco de la tarde, es para toda la familia, con tesoros clásicos de la animación y protagonistas como el Correcaminos, Tom y Jerry, Pedrín y el Lobo, obra maestra de Disney de 1946, o El príncipe y el mendigo, una producción de 1990 con Mickey, Donald, Goofy y Pluto.

A las siete de la tarde, ya para mayores de 18 años, está prevista la proyección de varias cintas bajo el título de Super-8 Avant Garde. Más allá de la era digital. Incluye cortos de vanguardia como la célebre animación de Bob Godfrey de 1971 (candidata al Óscar y que teloneó en los cines británicos a La Naranja Mecánica por elección del mismísimo Kubrick) o nuevas propuestas como Perpetuum Immobile, un corto dirigido por Marc Martí y nominado como mejor pieza breve europea fantástica de 2015, además el videoclip musical La noche de San Juan, de Benedeti y Martí o una cinta "secreta de Lenny Lipton, de 1968, quien posteriormente desarrollaría para la NASA y James Cameron el sistema real 3D. Fugue in D MInor un corto filmado en 1972 por el nominado al Óscar Eric Thiermann es otro de los filmes preparados, que irán acompañados de varios anuncios publicitarios, siempre en el mismo formato.

A las ocho y cuarto será el turno de las Imágenes recuperadas, auténticas joyas de los años cuarenta recuperadas y restauradas por Benedeti y que hablan de la historia de la ciudad y atesoran la memoria colectiva de los coruñeses: La Coruña (1973), un documental recuperado que se vendía en la tienda de su autor, Antonio Docampo, en rúa Nova, por 5.000 pesetas de la época; y El desastre del Urquiola y Estampas Sadenses, filmadas por José Luis Moar, que participó en la organización del evento, también junto a Fernando Pujalte.