Cáritas ha sido de las primeras organizaciones sociales que ha presentado aportaciones al Concello para la elaboración de la ordenanza de Renda Social Municipal. La entidad da su aprobación a la iniciativa municipal aunque pedirá dos cambios: agilizar el tiempo que pueda transcurrir entre la petición de ayuda y la concesión de la misma por excesiva burocracia y que se entregue el dinero directamente a los beneficiarios y no a través de asociaciones, como en principio prevé el Gobierno local.

A los trámites burocráticos alude también el PP local para advertir de que el mecanismo que los futuros beneficiarios deban seguir para solicitarla provocará el colapso en Servicios Sociales. El edil popular Miguel Lorenzo apunta que no se opone a que se financie el pago a proveedores de servicios a los ciudadanos que no pueden hacer frente pero sí es contrario a que se denomine renta social municipal.