Para quienes viven en Os Castros, O Castrillón y A Gaiteira, la de Oza es la playa de su barrio, ya que su proximidad invita a los vecinos a desplazarse a ella en lugar de a las del resto del municipio. Pero sus características hacen que también acudan a este arenal numerosas personas de otras partes de la ciudad, atraídas por la tranquilidad de las aguas causada por su ubicación al fondo de la ría y la protección del contradique de la dársena de Oza.

Por eso no es extraño que en muchos días de verano la playa esté abarrotada de coruñeses en busca del disfrute del sol y el baño, hasta el punto de que en ocasiones es complicado hacerse un hueco para tenderse en la arena. Esta situación ha animado a la asociación de vecinos de A Gaiteira-Os Castros a reclamar la ampliación de Oza con el borde marítimo que tenían las antiguas instalaciones de Astilleros Valiña antes de su traslado a la dársena pesquera próxima. La entidad defiende que, con "poco coste" se podría adecuar el espacio para uso de baño y embarcación de remos y windsurf.

Cuando esta empresa se reubicó en los antiguos Varaderos de A Coruña, sus terrenos fueron adquiridos por la inmobiliaria Isoman, que proyectó un edificio de viviendas allí. La crisis acabó por afectar a esta firma, que utilizó esta propiedad para saldar sus deudas con una entidad financiera, por lo que el proyecto se mantiene a la espera de que mejore el mercado de la edificación.

El espacio situado entre el lugar que ocupará el futuro inmueble y el mar debe quedar libre, de acuerdo con la legislación, pero la entidad vecinal de A Gaiteira-Os Castros quiso conocer la opinión de la Demarcación de Costas al respecto, cuyo director en Galicia, Rafael Eimil, confirmó al colectivo que esa franja del litoral debe mantenerse como pública y que no está prevista autorizar sobre el antiguo cantil y la rampa del astillero ninguna instalación deportiva como las que existen actualmente, ya que en la zona se halla una nave de la Sociedad Deportiva As Xubias y el Club de Vela Playa de Oza.

Los vecinos se han entrevistado además con representantes municipales, a los que expusieron su iniciativa y que, según la asociación, la acogieron de forma favorable, por lo que les propusieron que el Ayuntamiento se haga cargo de esa franja costera para llevar a cabo obras de escasa relevancia para facilitar el acceso al lugar, hoy cerrado por una verja, así como para adecentarlo y permitir que pueda ser utilizado por los ciudadanos.

La apertura al público de este tramo de costa proporcionaría una mayor longitud a la playa, que además contaría con un espacio diferenciado en el antiguo astillero, ya que la entidad vecinal no se plantea un vertido de arena como el que se efectuó a principios de los años noventa para crear la playa de Oza tras la desaparición de la del Lazareto.

La pelota queda ahora en los tejados de la Demarcación de Costas y del Concello, aunque la intención del Gobierno local de preservar el litoral situado entre el puente de A Pasaxe y el puerto, en el que se pretende la construcción de un paseo que continúe el de O Burgo, puede favorecer la propuesta de los vecinos sobre la ampliación de Oza, pero será Costas, que tiene la competencia sobre la ordenación del borde marítimo, quien tenga la última palabra sobre la configuración definitiva de este enclave.

En la reunión con el Gobierno local, la entidad presidida por Paulo Sexto, mostró también su desacuerdo con que " en la cantera situada detrás del astillero, ya en terreno municipal, se proyecte construir un edificio". La entidad había presentado alegaciones contra esa edificación, aunque el anterior Ejecutivo municipal no respondió a sus críticas.