El proyecto alternativo del Ministerio de Fomento para ampliar la avenida de Alfonso Molina ha llegado antes al buzón de la oposición que al del propio Gobierno municipal. Al menos eso es lo que se deduce de las declaraciones de los concejales del Partido Popular, que ayer, por boca de Begoña Freire y Martín Fernández Prado, anunciaron que este viernes comenzarán una campaña informativa entre los vecinos para dar a conocer los detalles de una propuesta de Fomento a la que el equipo del alcalde, Xulio Ferreiro, todavía ayer no había tenido acceso.
La propuesta del Gobierno local fue trasladada a Fomento en septiembre y, hasta el momento, continúan a la espera de conocer la opinión de los técnicos del ministerio. "Nosotros hicimos esa propuesta de humanización. La ministra me dijo que habría avances en ese sentido y eso para nosotros es una lectura positiva", afirmó Ferreiro, que recalcó que se reunirá con Pastor en cuento reciba su contraoferta.
Este proyecto sería la respuesta del ministerio al dossier presentado por el Gobierno de Marea a la ministra Ana Pastor el 15 de septiembre y en el que se planteaba pasar de la idea inicial de ampliar un carril por cada sentido a mantener los tres actuales y crear zonas verdes, peatonales y para bicicletas. Según Fernández Prado, esta contraoferta del Gobierno central confirma que "ampliar es compatible con humanizar" y acusó al Concello de estar "recurriendo a la demagogia" para no explicar el proyecto de Fomento. El propio Ferreiro, sin embargo, manifestaba ayer no haber recibido ningún nuevo proyecto. "Estamos a la espera de que se nos traslade la información", aseguró.
Los populares consideran que, demorando la obra, la Marea está "poniendo en peligro" una posible reforma de Alfonso Molina así como otras actuaciones, como la ampliación del puente de A Pasaxe. "Fomento planifica las obras a largo plazo y en conjunto, como una red viaria global. No podemos pedir ampliar A Pasaxe si después se va a encontrar un tapón en Alfonso Molina", recalcó Fernández Prado, que acusó a la Marea de presentar "tan solo un dibujo sin ningún informe ni análisis global".
Este será el hilo argumental que trasladarán a asociaciones vecinales, de comerciantes y profesionales del transporte con los que comenzarán a reunirse a partir de esta semana. Begoña Freire defendió que el planteamiento de la Marea para la avenida hará Alfonso Molina un "embudo" al convertir "carriles de aceleración en jardines". Los populares consideran que la ampliación a cuatro carriles por sentido es "imprescindible" para poder establecer un carril bus o Vía de Alta Ocupación (VAO) y para mejorar la seguridad vial en los enlaces.
Uno de los argumentos que esgrime la Marea para defender la no ampliación a cuatro carriles es que, con la finalización de la tercera ronda, el volumen de tráfico por esta avenida descenderá. Los populares, sin embargo, consideran este diagnóstico errado y pronostican que la densidad de vehículos no hará más que aumentar en el futuro, como consecuencia del crecimiento de A Coruña y su área metropolitana.
El Gobierno municipal de Carlos Negreira había llegado en 2013 a un acuerdo con el Ministerio de Fomento para ampliar con un carril por cada sentido Alfonso Molina. Al margen de esto, poco se había dicho sobre los detalles de aquel diseño, salvo la instalación de una pasarela peatonal entre Pedralonga y Palavea y que la obra sería costeada por la concesionaria de la AP-9, Audasa. El Ejecutivo popular pospuso la firma del convenio con Fomento a después de las elecciones municipales que auparon a la Marea Atlántica al frente de María Pita. El planteamiento del actual alcalde, Xulio Ferreiro, y su equipo sobre este vial era bien distinto al del PP y exigieron, antes de dar un paso más, replantear el diseño para "humanizar" la avenida.
