El proyecto de la estación de autobuses que irá integrada en la intermodal fija la entrada y salida de los vehículos por la avenida de A Sardiñeira, lo que obligará a que circulen por las avenidas de San Cristóbal y de Arteixo. Para girar hacia la estación desde esta última vía se construirá una rotonda elíptica en Agra dos Mallos.

En ese mismo lugar se instalará otra rotonda y se abrirá una nueva calle para conectar con la avenida de A Sardiñeira, desde la que se accederá ya a la estación. Este nuevo itinerario sustituye al que se había establecido inicialmente a través de la avenida de Salgado Torres y fue analizado ayer en la reunión que mantuvieron la directora xeral de Mobilidade con los concejales Xiao Varela y Daniel Díaz, responsables de Rexeneración Urbana y Mobilidade Sostible respectivamente.

El Concello será el responsable de construir las nuevas rotondas y el vial, además del aparcamiento subterráneo que se situará bajo la dársena de los autobuses de la intermodal. También le corresponderá al Ayuntamiento la urbanización del entorno de la estación, en el que figura la plaza de San Cristóbal, la ronda de Outeiro y su viaducto sobre la avenida de Alfonso Molina.

Este diseño viario modificará el recorrido de acceso a la terminal que efectúan ahora los autobuses metropolitanos, ya que en la actualidad los procedentes de entran por las avenidas de A Pasaxe y Alfonso Molina para luego entrar en el casco urbano hasta la estación de autobuses. Tras la construcción de la intermodal, el transporte metropolitano confluirá hacia la avenida de San Cristóbal, a la que beneficiará la reforma en Lonzas para el enlace con la tercera ronda