El alumbrado navideño no será motivo de enfrentamiento entre comerciantes y Concello durante estas fiestas. Después de cuatro horas de reunión, las asociaciones llegaron ayer a un acuerdo con el Concello por el cual será este quien asuma el coste eléctrico de los arcos de luces que decidan instalar los comerciantes en sus calles.

De este modo, las luces que coloquen estas entidades en los barrios complementarán a las que pondrá directamente el Concello, a través de una empresa contratada para su instalación. El recorte en los fondos destinados a esta partida había generado críticas entre los pequeños empresarios de los barrios. La reducción no era pequeña. Si en 2012 el Gobierno del PP había invertido en torno a 560.000 euros en alumbrado de Navidad, el actual Ejecutivo de Marea preveía destinar este 2015 242.000 euros, 320.000 euros menos.

La distribución calle por calle de estas luces municipales fue ayer uno de los asuntos tratados en la reunión. "Cambiamos por completo el reparto de calles previsto por la empresa, pero agradecemos que hayan contado con nosotros", asegura el presidente de la Federación Unión de Comercio Coruñesa (FUCC), Antonio Amor.

El portavoz de los comerciantes se mostró "contento" por el resultado de estas conversaciones, aunque lamentó los recortes. "Dentro de lo malo, vamos a contar con una ciudad lo más iluminada posible", indicó, tras señalar que habrá decoración en zonas comerciales pero también en otras calles menos transitadas y en espacios públicos, como plazas.

En el acuerdo, el Gobierno local no ha establecido ningún tope máximo de gasto eléctrico para las luces que instalen los comerciantes, si bien estos todavía no han decidido el número de arcos que colocarán ni dónde lo harán. "Ahora nos toca hablar con los comercios, ver cuánto recaudamos y, a partir de ahí, buscar quien nos alquile las luces", afirmó.