Los trabajadores del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) exigen a la Xunta más inversión en personal y que, si se plantea repensar la tercera fase del plan director del centro, que tenga en cuenta las prioridades de los enfermos y de los empleados que trabajan en el hospital.

La presidenta de la junta de personal del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña, María Seijo, denuncia que el plan director, en 2015, ya tendría que estar terminado y que está fuera de lugar la intención de la Consellería de Sanidade de revisar los planes iniciales para esta tercera fase, en la que se iba a reformar el servicio ambulatorio, construir un aparcamiento de medio millar de plazas -sin aclarar si la gestión sería pública o privada- y ampliar el hospital Materno Infantil.

"Están hablando de la tercer fase y todavía no han terminado la segunda. Vino en marzo la entonces conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, a inaugurar tres quirófanos que todavía no funcionan", denuncia Seijo.

Sobre la ampliación del Materno Infantil, la presidenta de la Junta de Personal y el delegado de Sanidad de Comisiones Obreras, Miguel Cacheiro Porto, coinciden en que, primero hay que decidir en qué se va a convertir este edificio. "Hay una planta con 42 de camas de ginecología, con vistas al mar, que está cerrada, parece una escombrera", explica Seijo. "Las instalaciones, más que ampliarlas, hay que modernizarlas", se queja Cacheiro Porto.

Para el delegado de Comisiones, es esencial que la inversión pase por el incremento de personal, por "no cerrar camas en verano, por abrir las plantas que ya no se utilizan en el Materno Infantil y en el Abente y Lago". Fuera del proyecto director, pero en un plano que afecta también al hospital, Cacheiro Porto pone el incremento de personal en atención primaria, como medida para evitar "los colapsos en urgencias".

Tanto Seijo, de la CIG, como Cacheiro Porto, de Comisiones, consideran que esta intención de la Consellería de Sanidade de poner en fase de estudio, de nuevo, la tercera fase del plan director es una "maniobra política" que se enmarca dentro del periodo previo a las elecciones generales del 20 de diciembre.

Seijo pone el dedo sobre la llaga de los plazos y su "incumplimiento constante". Para la presidenta de la Junta de Personal, el documento era "bueno" cuando se presentó y para la demanda que había, pero cree que hay partes que, por no haberse hecho a tiempo, pueden quedar obsoletas.

"En abril, la Xunta dijo que habría 18 quirófanos para final de año y todavía no empezaron las obras y eso es todavía de la segunda fase", dice Seijo, que denuncia que solo se reformaron las Urgencias, de esta parte del plan director, aunque no con el resultado esperado.

Se quedaron atrás en la ejecución, la nueva central de esterilización, los vestuarios y el área dedicada al diagnóstico por imagen. "Ahora hay que reformar también la farmacia, porque se queda pequeña", explica Seijo, que no confía en que la revisión que pueda hacer del plan director "un gobierno que no apostó por la sanidad pública" sea beneficioso para sus usuarios.