El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, explicó ayer que los desahucios se habían frenado por la "presión social" y que no había sido la firma del Código de Buenas Prácticas de las Entidades Financieras. Ferreiro dijo que, entre 2013 y 2015 el protocolo de colaboración entre los Juzgados, la Xunta y los Concellos solo había atendido 40 casos. Lo hizo en las Xornadas de Dereito ao Consumo. La Xunta adelantó que en 2016 se creará un censo de casas vacías.

El contacto del Gobierno municipal con los Juzgados, según indicó Ferreiro, permitió "engrasar" el protocolo firmado por el anterior Ejecutivo local para detectar riesgos de exclusión social en los juzgados. "Nos dimos cuenta de que, en la práctica, no tenía seguimiento desde el Ayuntamiento y que en los juzgados muchas veces se olvidaban de la existencia del protocolo. Se trataba de un buen instrumento normativo que en la práctica no funcionaba", sentenció el regidor, quien aseveró que "hoy" hay "una comunicación fluida entre los juzgados encargados de las ejecuciones y los servicios municipales".

El alcalde también destacó otras medidas municipales para garantizar el acceso a la vivienda como la Renda Social Municipal, que el Concello pondrá en marcha a principios del próximo año. La Xunta, por su parte, destacó que cuenta con medidas para paliar los efectos de la pérdida de vivienda.