La armonía entre el Gobierno local y el grupo municipal del PSOE que restablecieron las aprobaciones en pleno de la modificación del crédito y de las ordenanzas fiscales con el apoyo socialista en los últimos dos meses refuerza el entendimiento estratégico entre grupos de la Corporación para sacar adelante asuntos urgentes, aunque no ofrece respiro a la resolución de otros temas municipales. El PSOE apremió ayer al Gobierno local a que retome las negociaciones para modificar "lo antes posible" las ordenanzas que quedaron pendientes tras la aprobación en el último pleno. El llamamiento contiene además el interés de los socialistas por participar en la elaboración del presupuesto de 2016, cuestión para la que aseguran que el Ejecutivo aún no los ha convocado. Fuentes del Gobierno municipal apuntan que prevén contactar "en breve" con el PSOE para hablar sobre las cuentas del próximo año.
"Ya está tardando la convocatoria de la comisión negociadora y no hemos recibido ninguna llamada para reunirnos", advierte el concejal de la oposición José Manuel García, quien recordó que ambos grupos pactaron los cambios en las ordenanzas más urgentes y adelantó algunas medidas que defiende el PSOE para aliviar la presión fiscal de los coruñeses.
El edil propone, entre otras iniciativas, que se incorporen rebajas en las tasas a los mercados municipales; descuentos por el uso de entidades vinculadas a la promoción de la música; reducciones por la utilización de equipamientos deportivos municipales; o apoyos fiscales al pequeño comercio.
El PSOE apoyó la decisión del Ejecutivo de Marea de subir el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) al Puerto del 0,6% al 1,3%, y ahora apuesta por utilizar el incremento previsto de la recaudación en acciones de promoción de la ciudad como destino crucerístico o foco de actividades náuticas. Pero ni estas medidas las ha podido consultar el PSOE con el Gobierno local ni ha podido aún exponer sus propuestas para contribuir en la elaboración del presupuesto del próximo ejercicio. García reconoce que, pese a que demanda esa próxima reunión desde sus filas en la Corporación, la Administración local no está actuando "de mala fe", sino que está "saturada de trabajo", aunque le advierte de que después "no puede pretender acelerar en la recta final".
El concejal socialista lamenta que el Ejecutivo no ha enviado a su agrupación "ni una línea del presupuesto" pese a que, añade, sabe que tendrá que contar con el respaldo del PSOE para dar luz verde a las próximas cuentas. García avisa de que su partido no quiere recibir "todo hecho" por parte del Gobierno si quiere contar con el beneplácito del grupo socialista al llevar el presupuesto a la votación del pleno.
Los socialistas asumen que las cuentas de 2016 serán aprobadas ya comenzado el próximo ejercicio, al contrario que ocurrió con el presupuesto de este año, el último del mandato del PP. El Gobierno local afirma que prevé llamar al PSOE próximamente, sin concretar más. El socio, con el que por el momento hay buena sintonía, espera la llamada.
