El alcalde, Xulio Ferreiro, anunció ayer que el Gobierno local estudiará la exigencia de una indemnización a la empresa fabricante de la tarjeta Millennium por incumplimiento de contrato ante los sucesivos retrasos en la entrega de estos documentos, que el Ayuntamiento no puede facilitar a los usuarios del bus desde hace un mes. "La gente tiene toda la razón del mundo para estar enfadada", declaró Ferreiro, quien atribuyó el problema con esta tarjeta a una "mala planificación" desde el momento en que se eligió, ya que este medio de pago utiliza un sistema que origina "muchísimos fallos", a lo que se une que la fabricaba una sola empresa que quebró. Su tecnología fue adquirida por una compañía alemana que es la que ahora se retrasa en el suministro de las tarjetas,
La concejala del PP Rosa Gallego acusó al alcalde de limitarse a pedir disculpas a los ciudadanos y destacó que los usuarios del bus afectados por la falta de tarjetas son casi 2.500. La edil recordó que estas personas se ven obligadas a pagar la tarifa completa para viajar o solicitar la tarjeta metropolitana, por la que deben abonar dos euros. También puso de relieve que esta situación perjudica a los beneficiarios del bonobús social, que no tienen acceso a descuentos y como alternativa al problema mencionó la distribución gratuita de la tarjeta metropolitana en oficinas municipales y aplicar los descuentos, aunque el Concello asegura que esa tarjeta tampoco está disponible porque su fabricante es el mismo que el de la Millennium.
