El antiguo comité de la fábrica de armas y los trabajadores despedidos integrados en UGT se concentraron ayer ante la Delegación del Gobierno para protestar contra el "silencio" del delegado del Gobierno, Santiago Villanueva, con respecto a los "compromisos" que adquirió con ellos. Los sindicalistas reclaman a Villanueva que realice gestiones ante la Agencia Tributaria en apoyo a sus denuncias. Para el presidente del antiguo comité, Roberto Teijido, la adjudicación de la fábrica se realizó en un proceso "turbio y preocupante".