La movilidad y el control del tráfico de la ciudad dependerá más de la tecnología a partir de las próximas semanas . El Concello ultima la instalación de las aplicaciones y sistemas de control contratados por el anterior Gobierno local en el marco de uno de los proyectos piloto de la iniciativa Smart Coruña. Las propuestas deberán estar en marcha a finales de diciembre, o al menos ese fue el compromiso adoptado por el Concello con la Unión Europea, que financia en un 80% la inversión en estos proyectos. Cámaras que registren la matrícula de vehículos estacionados en paradas de bus o semáforos inteligentes que modifiquen sus frecuencias para favorecer la circulación del transporte público serán algunas de las aplicaciones que se introducirán, de acuerdo con los pliegos del concurso publicado en la Plataforma de Contratación del Estado.

►Multas al pasar el semáforo en rojo. El Gobierno local instalará un total de cuatro semáforos con cámaras que captarán la matrícula de los vehículos que se salten la señal de rojo, con el fin de facilitar su sanción. Este sistema estará operativo en la plaza de Ourense, a la altura de la parada de taxis; en la avenida Linares Rivas, en dirección salida de la ciudad, a la altura de Marcial Adalid; en el cruce entre la avenida Finisterre y Alfredo Vicenti; y en la calle Juan Flórez, en dirección salida, en la esquina con la calle Nicaragua. A excepción de esta última calle, los soportes de las futuras cámaras ya eran visibles ayer en las otras tres ubicaciones. El Gobierno local asegura que el sistema estará en pruebas antes de estar totalmente operativo dentro de un mes.

►Cámaras de vigilancia. El Concello instalará nuevas cámaras de videovigilancia con varios objetivos. Por una parte, se busca conocer mejor las corrientes de tráfico a partir del análisis de imágenes y conteos de coches. Por otra, se empleará para sancionar a vehículos estacionados en doble fila o en paradas de bus urbano, buscando aumentar el espacio para la circulación en las Vías Prioritarias Vigiladas (VPV).

►Control de zonas peatonales. El proyecto piloto incluye también un sistema de cámaras sin radar que controlarán el tráfico de vehículos en zonas peatonales reguladas. El lunes se instaló el sistema en Cordonería aunque en el futuro también serán visibles en el Orzán o paralelas a la calle San Andrés.

►Más Vías Prioritarias. Al igual que se recoge en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), los planos que incluyen los pliegos de este proyecto piloto contemplan la extensión de las Vías Prioritarias Vigiladas (VPV) -que actualmente solo funcionan en Federico Tapia- a otros viales como San Andrés, Juan Flórez, Médico Rodríguez, Fernando Macías o Santa Catalina. Estas vías se instalaron tras la supresión del carril bus y lo que pretenden es agilizar el tráfico, impidiendo el aparcamiento en cualquier parte y fomentando el estacionamiento rápido. En estas nuevas calles se instalarán, al menos, 19 cámaras de control.

►Semáforos sincronizados. Se creará un sistema de "Prioridad vehicular" para transporte público y vehículos de emergencias. El objetivo es que el sistema de frecuencias semafóricas no sea estático y el ritmo de cambio de colores pueda variar en función de los autobuses públicos, favoreciendo su circulación en función de los retrasos o las emergencias.

►Guías para peatones. Se desarrollará una aplicación móvil dirigida a personas con movilidad reducida que funcionará facilitando las rutas más cómodas y cortas para llegar a un destino en función de las necesidades que señale el viandante. La herramienta permitirá geolocalizar a la persona e incluirá información sobre el ancho de acera, el tipo de calle o el mobiliario urbano que se pueda encontrar.

►Aparcamiento "inteligente". A través de las cámaras en las VPV, se podrá mejorar el control sobre los vehículos aparcados irregularmente en paradas de bus y zonas de carga y descarga. Una aplicación móvil incluirá información sobre las plazas libres en todos los aparcamientos subterráneos de la ciudad en tiempo real, algo cuya viabilidad debe ser contrastada con las empresas concesionarias. Esta información también se incluirá en paneles informativos en la calle. También se desarrollará el AparcaCoruña, una aplicación móvil para pagar el aparcamiento, integrando estacionamiento en superficie y subterráneo. Al aparcar, se localizará al usuario, se activará un temporizador que parará al salir, de forma que se genere un ticket virtual que pueda verificarse para abrir la barrera.

►Información de la vía. A través de una aplicación móvil se podrá tener información actualizada sobre incidentes en la carretera, recomendaciones de ruta en función del tráfico o número de plazas libres en aparcamientos.

►Reserva y control de carga y descarga. Las empresas dedicadas a la carga y descarga contarán con una aplicación a través de la cual podrán reservar con antelación las plazas disponibles, quedando estas marcadas en rojo en la aplicación. La herramienta también permitirá denunciar a algún vehículo en caso de incumplimiento o violación de estas reservas. A través de la aplicación, la Policía Local podrá comprobar los tiempos de estancia de cada vehículo aparcado, en sustitución del clásico sistema manual de reloj que marca la hora de llegada.

►Más control de incumplimientos. El sistema a través del que se canalizará toda la información recogida por las cámaras de las vías prioritarias se cruzarán con las bases de datos municipales -policía, tráfico, ITV o seguros- con el fin de poder controlar mejor el cumplimiento de la normativa y sancionar las infracciones.