La Autoridad Portuaria informa de que, a partir de las once de la mañana de hoy, los viandantes ya podrán pasear por la totalidad de la superficie de la Marina, con la apertura del último tramo que quedaba por liberar y que estaba ocupado, en su mayoría, por casetas y material usado para las obras del túnel. Así, queda a disposición de los vecinos un área peatonal de 55.000 metros cuadrados.
Resta por abrir ahora el último tramo del túnel, bajo O Parrote y hasta la Solana. El Puerto insiste en que la infraestructura está lista y que los aspectos puntuales que se están corrigiendo no afectan al tráfico. El Ayuntamiento se niega a recibir la obra hasta que los técnicos avalen que esté en perfecto estado y que no habrá que hacer obras posteriores a costa de las arcas municipales.
"La obra del eje Marina-O Parrote, no solo ha permitido poner en valor el patrimonio arquitectónico de la ciudad", defiende la Autoridad Portuaria en una nota, "sino también ha supuesto una mejora sustancial de la conexión peatonal entre los barrios de la Ciudad Vieja, la Pescadería, la fachada marítima y liberará el tráfico en superficie dedicado al uso ciudadano".
Hace dos semanas el alcalde, Xulio Ferreiro, aseguró que el Gobierno local pretende abrir el túnel "cuanto antes", pero que su principal preocupación es que las obras estén "completa y correctamente terminadas". El alcalde detalló que los técnicos han localizado problemas de falta de estanqueidad en las tuberías de las aguas pluviales, lo que originaría un riesgo de inundación en caso de lluvia. Entre las causas de este defecto se menciona la existencia de hierros clavados, perforaciones de gran tamaño y grietas internas que pueden dar lugar a filtraciones y humedades. El espacio donde se encuentra el baluarte de O Parrote también muestra problemas de bombeo que podrían generar inundaciones. "Si ocurriese algún imprevisto, no queremos que el túnel posea aspectos que no cumplen la normativa de seguridad vigente", explicó el alcalde, quien no quiere estar "abriendo y cerrando una infraestructura nueva por obras", en especial porque el túnel cuenta con un solo carril.
La Autoridad Portuaria desmintió la existencia de "razones objetivas" que retrasen la apertura del túnel y destacó que recibió la obra el pasado 4 de diciembre, a lo que añadió que no se habría hecho "en el caso de que no se dieran las condiciones necesarias para ello". Sobre la estanqueidad de las tuberías, explicó que están "pendientes de los últimos remates" y que los trabajos se realizarían en horario nocturno y las empresas que inspeccionaron la obra ratificaron que las condiciones "son adecuadas para poner en servicio el vial".
En la nota remitida ayer, el Puerto acusa de "inacción" al Ayuntamiento. Los responsables portuarios reconocen que se están realizando "pequeños remates en aspectos muy concretos" pero que estos no afectan "en ningún caso al tráfico rodado".
