Después de conocer que la Comisión Europea no iba a apoyar con financiación los cuatro proyectos del puerto exterior para los que pidió ayudas, la Autoridad Portuaria garantizó que las actuaciones se iban a llevar a cabo y que los 18,6 millones de euros solicitados iban a ser asumidos por la propia entidad en los próximos años.

El Puerto adoptó una actitud tranquila pese al rechazo de Bruselas a sus planes, que no supone ningún alivio ante la elevada carga que supone el coste de las obras en Langosteira, y transmitió que la construcción de la galería de graneles líquidos, que tendrá un coste de 20 millones de euros, ya ha sido adjudicada y que la previsión es que esté acabada en 2017.

Recordó además que la segunda fase del contradique ya está en marcha, así como los trabajos de construcción de las nuevas explanadas para operaciones del puerto exterior. Y dio por hecho que en 2015 estaría licitada la redacción del proyecto de conexión ferroviaria a Langosteira, aunque el Ministerio de Fomento, a día de hoy, aún no dispone de la declaración de impacto ambiental del trazado seleccionado.