El estudio Crisis, suicide and productivity losses in Spain, que se publicará en el revista científica The European Journal of Health Economics recoge que en España la tasa de suicidios en 2013 fue de 8,2 personas por cada 100.000 habitantes. Este trabajo de investigación revela que el 31% de los fallecidos en 2013 se encontraba en edad laboral. En este estudio, se recoge también que un aumento del 1% en el Producto Interior Bruto (PIB) per cápita genera una reducción de 0,08 suicidios por cada 100.000 habitantes. La investigación se realizó con 17 regiones de España en las que se estudiaron las muertes por suicidio en relación con la crisis económica. En 2013, se perdieron por suicidio un total de 38.038 años potenciales de vida laboral, una cifra que, ajustada a las características del mercado de trabajo español da como resultado una pérdida de 566 millones de euros. Los investigadores apuntan a la necesidad de contar "con políticas sociales" centradas en la población más vulnerable, como los desempleados, así como con el desarrollo de programas de prevención del suicidio.