Poner la ciudad a punto para la próxima década tiene precio. Casi 800 millones de euros entre proyectos de inversión municipal, cofinanciados con la Unión Europea y proyectos del Estado, la Xunta y la Diputación coruñesa. Es el cálculo financiero de la estrategia Eidus, una hoja de ruta con objetivos y actuaciones con la que el Concello intentará convencer a Europa de que contribuya económicamente al nuevo modelo de ciudad. La junta de gobierno prevé aprobar el lunes este documento exigido por la UE, que rechaza financiar proyectos concretos sin demostrar una "visión coherente y a largo plazo" detrás.

En total, de los 800 millones, 134,2 corresponderían a los planes cofinanciados entre fondos comunitarios procedentes de programas como el Feder o, el Fondo Social o Horizon 2020 y fondos municipales. La primera convocatoria, que se presentará la próxima semana, está costeada con Feder y ha sido bautizada como Proyecto Singular de Desarrollo Urbano. El máximo que puede solicitar el Concello son 15 millones de euros, del total de 21,68 de presupuesto.

El Gobierno local diseña con este dinero diez líneas de acción, centradas en los nuevos espacios urbanos y el medio ambiente, las nuevas tecnologías y la integración. A ellos fían algunos de los proyectos que pretenden poner en marcha, como un nuevo concepto de espacios libres deportivos e infantiles o la erradicación de los asentamientos chabolistas, además de otras propuestas heredadas y paradas, como las reformas de los mercados y plazas como San Pablo o Monte Alto.

La propuesta municipal para los Feder lleva el título Ciudad de derechos, y abarca disposiciones para atender diferentes niveles de desigualdad y riesgo socioeconómico: desde las situaciones más graves y puntuales, como es el caso de los habitantes de A Pasaxe, a "vulnerabilidades menores" surgidas de problemas de accesibilidad, y derechos que "abarcan el conjunto de la ciudad", como los espacios públicos y el transporte en autobús o bicicleta.

►Inclusión social. El Concello plantea medidas para asegurar una renta mínima de subsistencia y favorecer el derecho al trabajo, y que todas las viviendas de la ciudad cumplan los requisitos mínimos de habitabilidad. Las medidas se apoyan en el Plan de Asentamientos Precarios de A Coruña, elaborado el pasado verano. Una de las metas es establecer ayudas para que el colectivo tenga empleo, dentro los sectores laborales detectados en los poblados por los técnicos: pesca y marisqueo, gestión de residuos, jardinería y trabajos forestales, construcción, mecánica, peluquería y estética, venta ambulante en mercados, mantenimiento de infraestructuras? Entre las acciones programadas, quieren que estos colectivos participen de la vida social y comunitaria de la ciudad y mejore su acceso a la educación.

►Hábitat digno. Hay tres líneas de actuación. Una para los asentamientos precarios, otra para las personas sin hogar y una tercera para el acceso a la vivienda en general. El Concello pretende fomentar la diversidad de la oferta de vivienda, más allá de los pisos, protegiendo "hábitats en retroceso" como los rurales. Otra idea es que la vivienda pública no esté pensada exclusivamente para dar respuesta a situaciones de emergencia social: "la vivienda pública debe servir como lanzadera que facilite la emancipación de los jóvenes y la formación de nuevas unidades de convivencia doméstica".

Programan, por tanto, aumentar el parque de vivienda pública de A Coruña y corregir los "desajustes" del libre mercado, para que hay "diversidad demográfica y social" en los barrios de la ciudad. Entre sus compromisos están convertirse en promotores en el parque ofimático, levantando un centenar de pisos, y adquirir más viviendas para usos "público-sociales".

En cuanto a las personas sin hogar, los proyectos se centran en aquellas que permanecen en la calle al margen de los centros de acogida. Han pensado levantar un centro de acogida de "baja exigencia" o cabinas domésticas para personas con dificultades de adaptación a las normas de los centros.

►Plan de accesibilidad, diseño universal y mejora del entorno urbano. Estos apartados del programa Eidus estudian, en primer lugar, incrementar la diversidad de uso de los espacios públicos, que todos los colectivos tengan lugar en ellos, y proponer soluciones de accesibilidad en vías estrechas para cumplir la normativa.

Parte de la inversión se destinaría a configurar espacios pensados para la infancia y para la práctica deportiva, con la idea de favorecer que esta última sea "espontánea", sin tener que pasar por el filtro de la administración o cualquier mediación. Han diseñado un plan bautizado como Reparquea Coruña, reparando y mejorando las áreas infantiles existentes y creando a su alrededor un entorno para que los niños desarrollen sus propios juegos, "sin supervisión ni monitorización".

Incorporan a este punto la plaza de San Pablo, para la que el Gobierno anterior había previsto una reforma paralizada con el cambio en María Pita. Quieren que sea escenario de una "acción piloto" para establecer recintos deportivos en espacios abiertos y dotarlos de mobiliario específico. En este punto sitúan también las obras que quiere abordar el Ejecutivo en O Parrote y la Marina cuando recepcione este último espacio: "humanización de la explanada, expandiendo el área de juegos, introduciendo nuevo mobiliario urbano y zonas de sombra". Entre las previsiones, está un plan para recuperar locales públicos vacíos, para ponerlos a disposición de jóvenes "y colectivos informales".

►Eficiencia en el alumbrado energético. El Concello solicita financiación para completar la mejora de las condiciones lumínicas del espacio público, eliminando las lámparas contaminantes e instalando tecnología para regular el alumbrado, además de intentar reducir la "contaminación intrusa" procedente de fachadas privadas y prestar atención a la iluminación de espacios concretos como zonas de juego infantil, sendas peatonales o zonas deportivas al aire libre.

►Movilidad sostenible. Este plan tiene por finalidad garantizar el transporte hacia las sedes de aquellos servicios necesarios para la inclusión social, defendiendo que, si hay variedad de medios, se favorece la inclusión social. El programa Eidus espera que los fondos europeos sirvan para fomentar la intermodalidad y la movilidad alternativa, sobre todo, con la periferia de la ciudad y los municipios vecinos como "compromiso prioritario". la intención también es aumentar el número de centros escolares con Rutas Escolares Seguras.

El Concello diseña una acción en "el eje del valle de Mesoiro", con un carril bici hacia el centro; y el "eje de Arteixo", para que haya más alternativas de movilidad en el antiguo camino a Fisterra y comunicación entre los márgenes en la antigua carretera de Baños de Arteixo. Solicitan ayuda para aumentar la flota de Bicicoruña y los puntos de aparcamiento. De forma paralela a la transformación de las líneas de autobuses urbanos, prevén usar parte del dinero comunitario para instalar nuevos modelos de marquesina de espera, sobre todo en las paradas de la periferia.

►Rehabilitación del patrimonio natural y cultural. El objetivo municipal es recuperar el patrimonio y la memoria del agua y del mar y aumentar los espacios para estar en contacto con el litoral coruñés, compensando a los barrios que no tienen contacto directo con la costa. En el documento figura la recuperación de fuentes, lavaderos y de la memoria fluvial de la ciudad como "derecho al agua". Hablan de Eirís, Oza (frente al instituto de Monelos), O Corgo, As Xubias, la bajada a Visma? Pretenden asimismo recuperar enclaves de la costa "desdibujados" por las infraestructuras durante las pasadas décadas y adecuar los espacios urbanos de la desembocadura del río Monelos y el correo de Ultramar (fábrica de tabacos) y la desembocadura fluvial en San Roque de Abaixo.

►Mejora del entorno de los polígonos. Las actuaciones se centrarían en adecuar el espacio urbano de los polígonos industriales, como partes de la ciudad "de pleno derecho que es necesario integrar". Proponen soluciones para ellos como la mejora de la comunicación con los tejidos residenciales del su entorno y la recuperación de los cursos fluviales que dibujaban los límites, tanto de Agrela como de Pocomaco (ríos Meicende y Mesoiro). Consideran necesario retomar el Plan Director de Agrela, diseñado en 2013, y crear un espacio público, de nombre Porta do Val de Feáns. Esta acción consistiría en acondicionar el espacio bajo el viaducto del nudo AC-14 y tercera ronda para instalar una zona para los vecinos, que les conecte con la ciudad, y que tenga el aparcamiento, áreas de juego, de estancia, deportivas?

►Los mercados. La estrategia considera a los mercados "nudos de economía social", que hay que identificar con las respectivas zonas comerciales en las que cada uno se inserta y que hay que comunicar con transporte público. Abogan por tener una "programación complementaria" a su actividad normal y ofrecer programas de formación de vendedores y de estudio de su clientela.

En este punto, el Gobierno local inserta las reformas de Santa Lucía (con el centro de salud y el espacio vecinal), el mercado de Monte Alto y la plaza superior (recientemente paralizada para la modificación de proyecto), el mercado de San Agustín y el mercado e Adormideras. El Concello pretende también establecer un mapa de espacios de feria en la ciudad, "al menos uno por distrito", que contarían con puntos de anclaje para los puestos, electricidad, agua, saneamiento y wifi. En este apartado, se incluye el fomento de los huertos urbanos.

►Inventario urbano. Esta acción consistiría en el desarrollo de una plataforma tecnológica para avanzar en la gestión integral de los activos y servicios de la ciudad y optimizar su funcionamiento, bien sea en el cambio de las infraestructuras, como en el medio ambiente, la seguridad ciudadana o la movilidad.