La acera de la Marina está a la mitad de su ancho al desviar el Puerto el tráfico rodado por una parte para ejecutar obras de reparación de la calzada. Pero ayer esta mitad de acera también dejó de existir y los peatones corrieron grave peligro de atropello varias veces. Sobre las 09.25 horas un Audi se saltó el semáforo de obra de la Marina, donde había una larga cola de coches, al meterse por una apertura de la valla a la altura de Luchana. Pasó a toda velocidad por la acera y los peatones se echaron a los lados para salvarse. Regresó a la vía a la altura de Correos, sin hacer cola. Fueron varios los que repitieron esta maniobra.