La subasta de las tres parcelas que el Ministerio de Defensa posee en A Maestranza ejemplifica lo que puede hacer la administración pública y no hace: anteponer en todo momento el interés común. Defensa sacará a puja sus propiedades por 24,8 millones de euros con la intención exclusiva de hacer caja. Atrás quedan anuncios irrealizados de la subasta porque el pinchazo de la burbuja inmobiliaria truncó los planes del Ministerio. Hace más de diez años que Defensa estaba en disposición de vender las parcelas. La subasta la convocará el próximo mes de febrero porque, según ha admitido el propio Ministerio, promotoras inmobiliarias han mostrado interés en los tres solares. Las parcelas son resultado del acuerdo de Defensa con el Ayuntamiento en 1984 para la cesión a la ciudad de terrenos que dejaron de tener uso militar a cambio de edificabilidad, de la recalificación del suelo para que el Ministerio pudiera recaudar por su venta, como sucedió, por ejemplo, en Zalaeta y en el solar del antiguo cuartel de San Amaro. A Coruña obtuvo espacios como el monte de San Pedro o la propia plaza abierta en A Maestranza. Pero no se debe olvidar que esos espacios ya eran públicos, eran propiedad del Estado, que podía haberlos puesto a disposición del Ayuntamiento sin contraprestaciones. Aún se está a tiempo de que Defensa renuncie a la venta y a los ingresos millonarios que prevé con ella, para que ese suelo redunde en un beneficio social y permita a la ciudad ampliar sus espacios libres o su tan raquítico parque de viviendas de promoción pública.