Nueve de cada diez emergencias que atienden los bomberos del parque comarcal de Arteixo les obligan a pasar frente al de A Coruña porque su ámbito de actuación se extiende a Cambre, Culleredo, Carral y Oleiros. En caso de una emergencia extrema, esos minutos pueden marcar la línea entre el éxito y el fracaso en una intervención. Solo ese dato debería animar a las administraciones implicadas -concellos, Diputación y Xunta- a corregir la disfunción de la cobertura geográfica de los parques de bomberos en el área. A Coruña ha ofrecido a Arteixo trabajar en la comarcalización del servicio municipal contraincendios coruñés. El alcalde de Arteixo, el popular Carlos Calvelo, ya le ha trasladado al regidor coruñés, Xulio Ferreiro, de Marea Atlántica, que sería "una buena solución". Y el de Oleiros, Ángel García Seoane, de Alternativa dos Veciños, también apoya la propuesta. Ferrol ha dado pasos en esa línea, en una colaboración entre el Ayuntamiento y el Consorcio Provincial Contraincendios, integrado al 50% por la Xunta y la Diputación. Después de años en los que a cada emergencia grave en la comarca le seguía un debate político estéril sobre la coordinación de los parques de bomberos, la base fraguada entre A Coruña y Arteixo debe implicar a Xunta, a Diputación y al resto de concellos. Juntos deben cerrar un acuerdo, fundamentalmente de competencias administrativas y de financiación del servicio, que mejore la seguridad de los ciudadanos.