El máximo responsable del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, tendrá que hilar fino para elegir el nuevo timón del partido en una provincia cuyos votos se han demostrado esenciales para superar el último escalón hasta la mayoría cómoda. Una provincia en la que el voto rural en las municipales, al contrario que el urbano, ha seguido mayoritariamente fiel a la formación y cuyos alcaldes, por tanto, solicitan más consideración orgánica. Los nombres de las quinielas para sustituir a Carlos Negreira, que el miércoles anunció la renuncia a su cargo, son la base más joven de la cúpula actual, dentro del proceso de renovación que intenta diseñar y controlar el presidente del partido.

Dicho proceso se inició el pasado junio, cuando el presidente de la Xunta encargó a un grupo de políticos la elaboración de una ponencia política para recuperar los votos populares. Todos en torno a los cuarenta años, todos con la intención de ofrecer un perfil renovado del Partido Popular. Al frente, uno de los que podría suceder a Negreira, el exalcalde de Ferrol, José Manuel Rey Varela, aupado por el resultado de las municipales, en las que se quedó a las puertas de revalidar. Conocedor de los regidores por haber sido presidente de la federación gallega de municipios (Fegamp), fue uno de los seleccionados por Núñez Feijóo para la recta final de la legislatura como conselleiro de Política Social.

Otro de los jóvenes valores elegidos tanto para la ponencia como para este Ejecutivo de última hora es la nueva titular de Medio Rural, la melidense Ángeles Vázquez, nacida en 1972 y que ha sido diputada provincial y en el Congreso. Nunca el PP en A Coruña había tenido como cabeza visible a una mujer y nunca una persona que no perteneciese al entorno de A Coruña o Ferrol. Su número dos en el departamento autonómico es Belén Docampo, histórica del partido y conocedora de los políticos municipales coruñeses, desde cargos orgánicos y desde la delegación territorial de la Xunta en A Coruña, trabajo que ejerció hasta la remodelación del Gobierno autonómico, en octubre.

Es el puesto al que ha regresado Diego Calvo, expresidente de la Diputación, y al que ya han preguntado sobre su posible candidatura a heredar la misión de Negreira. Ayer evitaba aclarar si se presentará como candidato. "Ya veremos", respondió sobre el congreso que el partido celebrará en marzo. Tanto Núñez Feijóo como Negreira repiten la palabra "cantera" y este último refuerza los rasgos que se buscan: "Hay muchas personas que lo pueden hacer bien, jóvenes en distintos puestos que han tenido muchas responsabilidades".

Entretanto, hay otro hueco que llenar, el que deja Carlos Negreira en la portavocía del grupo popular en el Ayuntamiento. Rosa Gallego parece la sucesora natural, dado su papel político como número dos cuando el PP gobernaba en María Pita y ahora en las filas de la oposición. Es el inicio del camino para elegir un candidato que recupere el Ejecutivo en 2019. Con ningún perfil que se ajuste a los nuevos caminos que busca el PP en el grupo, el alcaldable podría llegar, al igual que pasó con Negreira, del exterior.