El Concello asumirá la reforma de las "necesidades más urgentes" del colegio de Infantil y Primaria María Barbeito, que la pasada semana amaneció con filtraciones de agua y humedades en el interior de un aula de niños de tres años. La Concejalía de Xustiza Social e Coidados anunció ayer que destinará a este fin un total de 27.522 euros para, "con la mayor celeridad", poder poner fin a las goteras.

Con la reparación se sustituirán las planchas de las cubiertas del edificio que se encuentran agrietadas o rotas, se colocarán láminas laterales en chapa galvanizada, se limpiarán las canalones y se aplicará una pintura impermeabilizante en toda la cubierta. Concello y Gobierno gallego, sin embargo, continúan tirándose el uno al otro la patata caliente y no acaban de consensuar quién es el responsable de la sustitución integral de las tres cubiertas del centro, que según los padres y madres de los alumnos llevan dando problemas desde hace cinco años.

El Ejecutivo local entiende que este cometido corresponde a la Xunta y que el Concello solo debe hacerse cargo de pequeñas reparaciones. De hecho, desde la Concejalía apuntan a que el propio Gobierno local ya estaría asumiendo responsabilidades que no le competen, en alusión al proyecto de sustitución de una de las cubiertas, que se sacó a concurso por más de 145.000 euros el pasado mes de septiembre pero que continúa sin adjudicarse, en fase de valoración.

La Xunta, sin embargo, mantiene la versión contraria. El conselleiro de Educación, Román Varela, responsabilizó ayer del estado del centro al Concello, a quien acusó de ser "incapaz" de ejecutar el presupuesto municipal. "Hay quien defiende la enseñanza pública de boquilla", reprochó el responsable autonómico de Educación. La misma versión mantuvo el delegado territorial de Educación de la Xunta, Indalecio Cabana, en la reunión que ayer por la mañana mantuvo con la dirección del centro y representantes de los padres y madres del colegio.

La administración autonómica asegura que este tipo de intervenciones son competencia municipal amparándose en un acuerdo firmado entre la Consellería y la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) en 2007, en el que se establece que son los municipios los responsables de solventar problemas de goteras. El Concello replica que esto se refiere a obras menores pero que las grandes intervenciones, como sería el caso de la renovación integral de las tres cubiertas, compete a la Xunta.

Las goteras, que la pasada semana afectaron principalmente al aula de alumnos de tres años, despertaron el malestar entre los padres. La concejal de Xustiza Social e Coidados, Silvia Cameán, defendió la "responsabilidad" del Concello con la educación y las familias de los niños y reclamó a la Xunta "lealtad institucional" y "asunción de las competencias". Cameán afeó a la Xunta que la pasada semana el alcalde, Xulio Ferreiro, solicitase una reunión con el conselleiro, habiendo obtenido como respuesta que "no era posible". "Pedimos facilidades para un encuentro porque se trata del bienestar de la ciudadanía", dijo la edil.

En total, el Ayuntamiento cifra en 40 las actuaciones llevadas a cabo en el centro escolar desde el inicio del curso para reparar goteras, filtraciones, reparaciones de fontanería o limpieza de canalones.