El inicio de la jornada laboral en la oficina de Abanca situada al comienzo de la calle de la Torre fue sobresaltado ayer, ya que nada más abrir sus puertas, a las 08.20 horas, fue atracada por un hombre que entró con una pistola falsa y exigió que le entregaran el dinero que se custodiaba en la sucursal. "Dame todo lo que tengas", le dijo el individuo a una empleada de la entidad, de la que consiguió llevarse 600 euros, según fuentes policiales.

Tras obtener este escaso botín, el hombre abandonó el lugar a la carrera con rumbo desconocido. La policía investiga la autoría de los hechos, para lo que cuenta con la descripción realizada por los testigos, que solo pudieron indicar que el hombre ocultaba su rostro con la capucha de la sudadera que vestía y que tenía en torno a cuarenta años, así como que su aspecto era el de una persona toxicómana.

Tras sufrir el atraco, la sucursal, muy próxima a la plaza de España, quedó cerrada al público y un cartel que fue colocado a la entrada advertía que se debía a "motivos técnicos".

El último delito de estas características ocurrió el pasado 28 de diciembre en la oficina del banco Sabadell Gallego en Novo Mesoiro, donde un hombre armado con una navaja consiguió la exigua cantidad de 85 euros tras amenazar a los trabajadores de la entidad. El atracador también cubría su cabeza con una capucha pero su indumentaria era peculiar, puesto iba ataviado con un mono de trabajo y un chaleco reflectante.