Si hay algo que define el estilo del escritor Javier Vizoso es su disconformidad ante la idea de someter sus creaciones literarias a un género en concreto. Prueba de ello son sus dos anteriores obras, El secreto de la señora Higgins y otros cuentos, una colección de relatos, e Instrucciones para tropezarse con Vivaldi, un ensayo de temática musical. En esta ocasión, Vizoso presenta su primer y último poemario, El tifón en la tormenta.

-El tifón y la tormenta

-Sí, el poema más antiguo data de 1996 y el más nuevo lo escribí hace unas tres semanas. Durante todos estos años he escrito infinidad de poemas, pero seleccioné los que mejor encajaran con lo que quiero transmitir en el libro.

-¿Por qué eligió el poema El tifón en la tormenta

-Considero que, de todos, es el que mejor me define. Para mí la tormenta es la vida, que en algunas ocasiones nos tambalea y nos lleva a contracorriente, y el tifón representaría mi carácter rebelde e inconformista.

-En el libro hay más de una cita de la obra de Alejandra Pizarnik. ¿Ha influido esta autora en sus poemas?

-La verdad es que no me suelo inspirar de un modo estricto ni académico en autores concretos. Me dejo llevar por lo que me transmitan, y parte de las obras de Pizarnik llegaron a mí cuando yo escribía poesía casi en secreto, me interesaron, y me trasmitieron ideas y perspectivas nuevas sobre la vida.

-Sus libros de cabecera.

-Hay cuatro novelas con las que me iría al fin del mundo: Cien años de soledad, Madame Bovary, Rayuela y La broma infinita, de David Foster Wallace, que me parece uno de los mejores escritores de la historia.

-¿En qué medida le ha beneficiado hacerse cargo de la publicación de El tifón en la tormenta

-Este libro no hubiera podido publicarse en edición convencional, ya que lo he hecho a mi manera, sin ningún tipo de condicionante. Publicándolo de forma independiente soy capaz de gestionar mejor los derechos de mi obra y llevar a cabo un control exhaustivo de las ventas.

-Ha escrito relatos, ensayo, y poesía, ¿le queda algo por escribir?

-Llevo escribiendo desde los nueve años hasta ahora y esa dinámica no tiene visos de cambiar. Lo que ocurre es que cada vez que escribo un libro en un determinado género, siento que lo agoto y tengo la necesidad de pasarme a otro formato. En este momento tengo entre manos una novela a la que llevo un tiempo dándole vueltas.

-¿Puede adelantar algo de su próximo proyecto?

-Tratará sobre la vida y las relaciones forjadas en ella. Al final, los escritores tenemos una visión de lo que nos rodea que queremos transmitir. Como decía Foster Wallace: "La literatura consiste en entender qué es ser un puto ser humano".

-Como responsable de comunicación de la Orquesta Sinfónica de Galicia, ha estado en permanente contacto con la música. ¿Descarta cultivar otra disciplina artística?

-No me lo he planteado. Hasta ahora me he movido mejor en la literatura, ya que es la disciplina que me permite canalizar mis pensamientos de forma más eficaz.