La Policía Nacional analiza si cerrar la oficina de denuncias de Lonzas durante las noches, los fines de semana y los festivos a partir del 1 de abril en lugar de la ubicada en Méndez Núñez, como había previsto la Comisaría Provincial. Fuentes oficiales de la Policía Nacional explicaron a este diario que están buscando una solución para "optimizar" los recursos que tiene el cuerpo, para "darle un mejor servicio" a los vecinos, con el objetivo de adaptarse al nuevo sistema de turnos que entrará en vigor ese día.

El comisario provincial manifestó a los sindicatos su intención de cerrar la comisaría de Méndez Núñez durante los fines de semana, las noches y los días festivos. Una postura que los sindicatos rechazaron, por entender que causaba un perjuicio a los ciudadanos. Las centrales trasladaron su oposición a la Jefatura Superior de Policía de Galicia, cuyos responsables se mostraron más decididos a cerrar la oficina de Lonzas, que tampoco aprueban los sindicatos. Mandos de la Comisaría Provincial mantendrán una reunión la próxima semana para acordar la propuesta que trasladarán a la Jefatura Superior.

Fuentes oficiales del 091 explicaron ayer que la decisión no está tomada ni fijado el plazo de implantación, por lo que el cierre de Méndez Núñez o de Lonzas es "una posibilidad como otras" encima de la mesa. La Policía Nacional, sin embargo, no detalló ninguna otra de las que se vayan a debatir para "dar un servicio más eficiente".

La oficina Norte, la de los jardines de Méndez Núñez, cursó el año pasado unas 12.000 denuncias, frente a las cerca de 8.000 que se presentaron en la Sur, en Lonzas, según fuentes policiales. El cierre nocturno y en fines de semana y festivos de la oficina de los jardines supondría el fin del servicio de la instalación policial más próxima a las zonas de ocio nocturno y botellón, donde generalmente se producen más incidencias susceptibles de ser denunciadas por quienes se han visto dañados. El nuevo sistema de turnos establece la reducción de un 20% de las patrullas de calle y prevé la reasignación de las brigadas de Seguridad Ciudadana a servicios fijos en edificios oficiales, judiciales, policiales y oficinas de denuncia. Los sindicatos prevén que algunas de las víctimas decidan no dar parte de delitos por no tener que desplazarse a la comisaría de Lonzas.