Retrata momentos cotidianos, desde un baile espontáneo en la calle a un paseo de la mano por la carretera. Dice el fotógrafo Dani Arias que su objetivo con esta muestra de imágenes no es otro que el de "sacudir las conciencias narcotizadas y adormecidas" en el Día Internacional de la Mujer, intentar despertar la curiosidad de quien las vea y, si puede, "que cada uno ponga su granito de arena" para luchar por la igualdad. Un viaje a la India en 2011 le puso delante a unas mujeres que ejercen de madres, que se pintan los ojos y se adornan la cara, que pican piedra cuando cae el sol a plomo en la carretera y que caminan kilómetros y kilómetros, incansables, transportando agua hasta sus casas y que esbozan una sonrisa, aun cuando ser mujer es motivo más que de sobra para ser asesinada o invisibilizada en su tierra.

"En un lugar en el que veneran a tantos dioses, no sé cómo no se dan cuenta de que las verdaderas heroínas las tienen muy cerca y que son estas mujeres", comenta Arias, que asegura que no hubo ni una sola de las protagonistas de los retratos que no quisiese ser inmortalizada por su cámara.

La exposición, Mujeres en la India, que cuenta también con unos textos que acompañan a las fotografías y con datos sobre el feminicidio en el país aportados por Unicef, estará hasta mediados de mes en el bar Marita Ron, en el Cantón Pequeño.