El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, repite visita a A Coruña, ya pasadas las elecciones y después de dos votaciones en el Congreso en las que, con un acuerdo insuficiente con Ciudadanos bajo el brazo, no consiguió mayoría para ser investido presidente. Visitará la plaza de Lugo, la Barrera y al rector, para después reunirse con la militancia en Zalaeta y analizar lo sucedido en las últimas semanas.

Pasadas las diez de la noche, Ferraz enviaba a los medios de comunicación el programa de visitas de Sánchez. Dos meses después de su recorrido electoral por el entorno de la plaza de As Conchiñas, vuelve a un mercado, pero no de barrio (plaza de Lugo, a las 12.30h). Será recibido por el rector, tras lo que dará un paseo por la zona de tapas de la Barrera (13.30). Cogerá el coche después de comer y visitará una explotación láctea en Mesía. Volverá a A Coruña por la tarde para un encuentro con sus militantes y explicar los últimos movimientos del partido en el Congreso de los Diputados.

Sánchez no ha escogido una ciudad donde los socialistas estén en plenitud de facultades. Sus resultados en las generales de diciembre repitieron los de las elecciones de mayo, con el PSOE como tercera fuerza en la urbe frente al tercio de los votos del PP y de En Marea.

En 2008, los socialistas coruñeses contribuían a la victoria de José Luis Rodríguez Zapatero con 67.302 votos para el Congreso, un 44,7% de los vecinos que depositaron su papeleta en alguno de los colegios de la ciudad. La caída en 2011 fue estrepitosa, hasta el 31%, ya tocados en los comicios locales por haberse quedado con 8 ediles y en la oposición coruñesa por primera vez desde 1983. En diciembre, ahondaron más en el laberinto: sumaron 28.927 votos, un 19,6%.

Las generales confirmaron el sorpasso sorpassoque les dio Marea en las municipales, donde los socialistas fueron relegados a la tercera fuerza en la Corporación de A Coruña, con un récord negativo de concejales (seis) pero con un papel de llave de gobierno. En un primer momento, apoyaron la investidura de Xulio Ferreiro, como alcalde de Marea Atlántica, al igual que esta fuerza permitía al PSOE, con tres concejales, volver a ocupar la presidencia de la Diputación.

El aparente acuerdo inicial -en el que no entraron en el Ejecutivo como sí hicieron en Ferrol- saltó por los aires poco después, algo que ha impedido aprobar el presupuesto, que irá a pleno probablemente sin consenso. Esto mantendrá prorrogadas las últimas cuentas del PP hasta 2016. En estos meses, la secretaria general de la agrupación, Mar Barcón, ha cedido el protagonismo en el grupo al actual portavoz, José Manuel Dapena, y a José Manuel García.

Al igual que en las otras dos ciudades coruñesas, en las que gobiernan candidaturas de iniciativa ciudadana que superaron al PSOE en votos, los socialistas ejercen en estos momentos una oposición contundente sin visos de cambio como tercer partido de la Corporación. El rol y la estrategia escogidas no cuentan con el apoyo unánime dentro del propio grupo.