La teniente de alcalde responsable del área de Personal, Eugenia Vieito, ha ordenado la apertura de un proceso de información reservada sobre el examen de tipo test para oficial de la Policía Local que se realizó el pasado 25 de febrero y que fue anulado al descubrirse marcas en las respuestas correctas. La investigación será dirigida por el jefe del Servicio de Deportes y Juventud y en ella se revisará toda la documentación que se manejó para la organización de la prueba, además de la contenida en expedientes personales, correos electrónicos y otros soportes.

La denuncia presentada por el sindicato CSI-CSIF, mayoritario en el 092, fue el motivo de que el examen, con el que se pretendían adjudicar ocho plazas de oficial de la Policía Local, fuese suspendido de forma cautelar. La central había localizado inicialmente marcas bajo el punto final en trece de las 120 respuestas correctas de la prueba y no descartaba que hubiera más.

El tribunal del examen aclaró el pasado 29 de febrero que algunas de las preguntas elaboradas por uno de los examinadores "fueron aportadas con la respuesta correcta subrayada" y que esa marca se eliminó para confeccionar el examen, aunque algunas de ellas se mantuvieron "accidentalmente". Para el tribunal, "se trata de un error informático" al suprimir el subrayado y se produjo tanto en la versión en castellano como en la de gallego, así como en "todas las copias que se hicieron de los exámenes", ahora custodiadas en la Secretaría General del Concello.

El mismo día en que el tribunal se pronunció, Eugenia Vieito ordenó la apertura de un expediente informativo sobre las causas de esta incidencia, así como la anulación de la prueba, en lo que coincidió con el tribunal, hasta que un informe de la asesoría jurídica municipal determine que puede continuar el proceso selectivo.

El portavoz de CSI-CSIF, Manuel Aceña, explicó que la marca hallada junto a las respuestas era "casi imperceptible" y que su aparición "pudo haber sido fortuita", aunque no tenía garantías de ello.