El Ejecutivo de Marea Atlántica retiró en verano la denuncia presentada por el Gobierno del Partido Popular ante el Tribunal de Cuentas. Los populares habían decidido continuar el procedimiento contable sin revisar los acuerdos, a pesar de que tanto la Fiscalía como el instructor, en una comunicación previa, se habían pronunciado a favor del archivo y que el mismo fiscal había advertido de forma explícita que era necesaria la invalidación de varias decisiones tomadas por el Gobierno vazquista antes de buscar culpables del agujero de 19,2 millones.

El mismo BNG, que puso en marcha esta iniciativa ante el Tribunal de Cuentas, se retiró en abril de 2015 del procedimiento al comprobar que el Gobierno del PP no iba a revisar los acuerdos considerados perjudiciales para los intereses municipales. Los nacionalistas llegaron a reclamar hasta cinco veces que el Ejecutivo municipal anulase los convenios de Someso, siempre con la negativa del PP, que impidió después el debate de este asunto en el pleno. Cuando el BNG presentó la demanda en Cuentas, el Ejecutivo llegó a solicitar el archivo del caso, pese a que habían sido los populares los que encargaron en 2012 el informe en el que se desvelaron las irregularidades cometidas durante la tramitación. A inicios de 2015, modificó su postura y decidió sumarse al procedimiento promovido por el nacionalista Xosé Manuel Carril, aunque manteniendo su negativa a revisar los acuerdos.