Aberto Gil, nacido en 1941, trabajó en el Circo de Artesanos de los 14 a los 18. A esa edad lo hicieron socio, tres años antes de lo que permitían al resto y sin cobrarle la cuota de 2.500 pesetas. Y allí conoció a su mujer, hace 56 años. Toda una historia ligada a la entidad de San Andrés, que ayer le entregó una distinción como socio veterano, dentro del acto de celebración del 169º aniversario. En él estuvo el alcalde, Xulio Ferreiro, que destacó la vertiente solidaria de la sociedad recreativa, fundamental para el nacimiento de la Cocina Económica y las Escuelas Populares Gratuitas. Lo acompañaron ediles del PP y el PSOE y el presidente de la Cocina Económica, Alberto Martí. Alfredo Rodríguez, presidente, y Josefa Abeleira, miembro de la junta, otorgaron además una distinción a la hija de María Insua, otra de las socias más longevas, que falleció antes de poder recibir el reconocimiento.