Cinco de los siete acusados de tráfico de droga transportada desde Madrid han negado su participación en los hechos que se les imputan, mientras que los otros dos procesados se negaron a declarar en el juicio oral que se celebra en la Audiencia Provincial de A Coruña.

El tribunal juzga a siete hombres que se enfrentan a penas de entre 8 y 9 años y ocho meses de cárcel por delitos de tráfico de drogas y contra la seguridad vial en un polígono de Ferrol. En concreto, la Fiscalía les acusa de participar en la compra-venta de heroína transportada desde Madrid.

De hecho, según se indica en su escrito de acusación, uno de los acusados, A.R., contactó con los acusados O.R.B. y con M.M.F., con el objetivo de consumar una compraventa de sustancia estupefaciente.

Para llevar a efecto dicha transacción, y siguiendo las órdenes de A.R., dos de los acusados alquilaron dos coches para viajar a Galicia desde Madrid. De este modo, se trasladaron a la Comunidad gallega FJ.G., B.R. y JA.R., trasladando los dos últimos la sustancia estupefaciente en el coche en el que viajaban.

Así, el pasado 27 de marzo de 2014, en el polígono Río do Pozo (Ferrol), los acusados procedentes de Madrid, siguiendo las indicaciones de A.R., se reunieron con el acusado O.R. y le entregaron una cantidad indeterminada de heroína, que adquirió con la finalidad de destinarla a la venta de terceros.

También acudieron a dicho polígono los acusados M.M. y R.G., quienes les entregaron una bolsa y cuatro paquetes rectangulares, los cuales contenían 1965,8 gramos de heroína que también habían adquirido con la finalidad de destinarla a la venta para terceros y cuyo valor en el mercado ilícito ascendería a la cantidad de 249.999,83 euros.

Persecución policial

Tras realizar la compra-venta, M.M. abandonó el polígono acompañado de R.G., tras lo que fue interceptado por agentes. Éstos trataron de cortarle el paso con el vehículo oficial, pero el conductor esquivó el coche, se subió a la acera, colisionó levemente con una señal vial vertical y continuó la huida a gran velocidad haciendo constantes cambios de carril y adelantamientos peligrosos.

En la sesión, cinco de los acusados, que sólo contestaron a preguntas de sus respectivos abogados, han negado participar en el tráfico de droga. De hecho, algunos aseguraron "desconocer" la operación. Mientras, los dos procesados restantes se han negado a declarar en la vista.

"Me asusté"

Sólo uno de los acusados, el que también se enfrenta a una pena contra la seguridad vial, se ha alargado más en su declaración. En ella, y a preguntas de su abogado, sí ha reconocido haber conducido sin carné y de un modo temerario, pero ha negado el delito de tráfico de droga. "Hubo un momento en el que yo me asusté", ha dicho al ser preguntado sobre su comportamiento al volante.

A su letrado, ha señalado que se "asustó" cuando vio que dos coches se le cruzaban en el camino. "Pensé que era la policía, y como iba si carné", ha apuntado.

Precisamente, en relación a estos hechos, ha declarado uno de agentes de la Policía que participó en la persecución. En concreto, este agente ha explicado que el vehículo, al que finalmente interceptaron, y en el que iban dos de los acusados, circulaba a gran velocidad.

Además, ha apuntado que durante su seguimiento vieron como uno de los dos ocupantes del vehículo "lanzaba una bolsa de plástico" que contenía varias cantidades de heroína, según confirmó este policía.

Por estos hechos, la Fiscalía pide ocho años de prisión para cada uno de los acusados por un delito de tráfico de drogas, además de un año y ocho meses para el acusado de la persecución.