El alcalde, Xulio Ferreiro, anunció nada más acabar el pleno que el grupo municipal de la Marea Atlántica presentará alegaciones a lo largo del próximo mes para enmendar los cambios aprobados por PP y PSOE en el pleno de ayer, que calificó de "despropósitos". La aprobación de las cuentas de ayer no fue definitiva sino inicial. Durante el mes de abril se podrán presentar propuestas de cambio al documento presupuestario. Su inclusión o no se votará en la sesión plenaria en que las cuentas se aprobarán de forma definitiva.

En el escenario más optimista, el Gobierno local podrá gestionar un nuevo presupuesto en 2016 a finales del mes de mayo, casi en el ecuador del año. La tardanza a la hora de llevar a pleno las cuentas fue uno de los flancos por los que atacaron al Ejecutivo populares y socialistas. "Traen un presupuesto que deberían haber traído en noviembre", les reprochó la portavoz del PP, Rosa Gallego, que achacó esta demora a los viajes del alcalde y a los encuentros con las "ciudades rebeldes".

Una crítica similar esbozó el PSOE. Su portavoz, José Manuel Dapena, acusó a la Marea de no ser "leal" durante las negociaciones y de intentarles "imponer" unas cuentas con "pinceladas" del programa socialista. "Se reunían con nosotros al tiempo que presentaban en la ciudad planes que no se habían acordado", recriminó Dapena, que alegó que si no presentaron sus propuestas con partidas cuantificadas hasta la semana pasada fue "porque no había cauces". "Si cree que tardamos mucho, debería haber traído el presupuesto en noviembre", afirmó.