El PSOE de A Coruña disfrutó ayer en el pleno municipal de una situación privilegiada: dos grupos antagónicos, Marea Atlántica y Partido Popular, se ofrecían a aprobar en su totalidad las enmiendas socialistas al presupuesto. El PSOE solo tenía que elegir y eligió al PP. El acuerdo entre socialistas y populares para secundarse mutuamente en sus enmiendas, gestado la misma mañana del pleno, horas antes de la apertura de la sesión, pesó más que la oferta de Xulio Ferreiro en el último momento para apoyar sin condiciones las propuestas del PSOE a cambio de que éste no se alineara con las del PP. El PSOE eligió y eligió en el lado opuesto de lo que había escogido la noche electoral, cuando comprometió su voto a favor de la investidura de Xulio Ferreiro frente al popular Carlos Negreira. Ante quienes le cuestionan por qué vota ahora con el PP, el PSOE alega que también votó con Marea para "facilitar" al Gobierno un presupuesto con el que trabajar. Pero eso no oculta que obliga a Marea a gestionar unas cuentas que no son las suyas. La ejecución de los proyectos, entre ellos los incluidos por PP y PSOE, dependerá ahora de la voluntad del Gobierno de Marea para llevarlos a cabo.