La exigencia del cambio de numeración en un tramo de la avenida de Oza procede del Instituto Nacional de Estadística, según informó ayer el alcalde, Xulio Ferreiro, quien detalló que ese organismo obliga a reordenar los números de las calles cuando no son correlativos. Ferreiro explicó que estas situaciones se producen en casos como la existencia de solares vacíos y que el Concello decidió aplicar esta medida aprovechando el cambio de la denominación de la avenida, hasta ahora General Sanjurjo.

El regidor asegura que esta modificación, por la que ayer expresó su queja la asociación de comerciantes Distrito Oza, debió realizarse hace tiempo y que se optó por llevarse a cabo en este momento para evitar mayores perjuicios a los vecinos. El grupo municipal socialista solicitó ayer saber si existe alguna partida municipal para ayudar a las personas afectadas por los cambios de nombres de las calles y que en caso contrario se incorpore al presupuesto del Concello.