Un vecino de A Coruña fue condenado por agredir a policías, contra los que azuzó a su pit bull, el pasado mes de noviembre en Labañou. El procesado aceptó que la juez le impusiese seis meses de cárcel y el pago de una multa de 2.700 euros, por lo que la vista no se celebró y la magistrada dictó sentencia oral en la sala. Los funcionarios fueron alertados porque el procesado paseaba a su can de raza peligrosa suelto y sin bozal sobre las 00.50 horas por la confluencia de la avenida de Gran Canaria con la ronda de Outeiro. El sospechoso, además, golpeaba con un palo los vehículos que estaban estacionados por la zona por la que caminaba. En concreto, rompió las lunas de tres turismos, a los que les causó daños tasados en 1.620 euros.

Al barrio se desplazaron varias patrullas de la Policía Nacional y, nada más verlas, el condenado se dirigió hacia uno de los coches, abrió la puerta y blandió hacia uno de los agentes una cuerda con un mosquetón "de grandes dimensiones" en su extremo. Además, azuzó al perro, que estaba suelto, contra los funcionarios. Así, logró que el animal entrara en el vehículo policial, lo que obligó a los funcionarios a abandonar el automóvil. Los agentes aprovecharon para encerrar al pit bull dentro del coche.

El inculpado admitió que mantuvo "una actitud" agresiva contra los miembros del 091, a los que les espetó frases como "la policía mató a mi padre y os voy a matar a todos", "gora ETA", "os voy a rajar de arriba a abajo, maderos, no me dais miedo, no tengo nada que perder", o "soy de los Marineros, yo soy de los de Franco, no os tengo miedo, uno a uno os voy a ir matando a todos, soy de Resistencia Galega".

"Lejos de calmarse ante la presencia de otras patrullas policiales, aumentó su agresividad y lanzó puñetazos y patadas a los agentes, alcanzando con varias patadas a uno de los policías", relata la magistrada del Juzgado de lo Penal número 4 en la sentencia. Los funcionarios redujeron por la fuerza al procesado, quien propinó una patada a un policía en el abdomen cuando era introducido en el coche policial. Además, golpeó el turismo, al que le causó daños que fueron valorados pericialmente en 68 euros. En comisaría también pegó a un agente, al que le ocasionó una contusión en una pierna.

El imputado ingresó antes de la celebración de la vista en la cuenta de consignaciones del juzgado el importe de las indemnizaciones a las que tuvo que hacer frente, por lo que la juez de Penal 4 tuvo en cuenta la atenuante de reparación del daño a la hora de dictar la pena. La defensa del procesado y el representante del Ministerio público llegaron a un acuerdo sobre la condena antes del juicio, por lo que la vista se suspendió y la magistrada de Penal 4 de A Coruña dictó sentencia de conformidad en la sala después de que el detenido reconociese los hechos. Contra el fallo no cabe recurso, ya que fue pronunciado con el visto bueno de todas las partes implicadas en el proceso.

El vecino de la ciudad no ingresará el prisión, ya que la juez de Penal 4 aceptó que los seis meses de cárcel a los que lo condenó por cometer un delito de atentado contra agentes de la autoridad queden suspendidos durante dos años a condición de que no vuelva a delinquir en ese plazo. En el caso de que cometa alguna falta durante ese periodo de tiempo, cumplirá el medio año de prisión.