El importante cambio en la circulación en el centro de la ciudad que ha supuesto la prohibición de circular por la superficie de la Marina obliga a la Policía Local a variar las frecuencias de los semáforos en esta zona para evitar atascos en la entrada y salida del túnel. Los cambios se llevan a cabo desde la sala de control de tráfico situada en la estación de autobuses, especialmente en las horas punta y sobre todo en la plaza de Ourense, punto en el que convergen los vehículos que entran y salen del vial subterráneo. En los últimos días se han producido retenciones a la salida del túnel en avenida do Porto a causa del elevado número de automóviles que circulaban por la zona y las detenciones a las que obligaban los semáforos existentes en este mismo vial y la plaza de Ourense, cuya frecuencia de paso habitual hacia Linares Rivas es muy corta.