El rectorado confía en que la Universidad coruñesa no sufra este año problemas de falta de liquidez como los que el pasado verano obligaron a suspender los nuevos compromisos de gasto. El rector, Julio Abalde, explicó ayer tras el Consello de Goberno que aprobó el anteproyecto de los presupuestos que la mensualización de las aportaciones de la Xunta evitará que se repita la situación del año pasado, ya que, excepto los fondos destinados a obras de mantenimiento y la paga extra de 2012, el resto de los recursos procedentes de la administración gallega se proporcionarán de forma periódica cada mes.

El vicerrector de Economía, Domingo Calvo, añadió que este modelo hará posible una "mejor gestión" económica de la Universidad y destacó la aprobación "por una amplia mayoría" del anteproyecto de los presupuestos. Para Calvo, el hecho de que la institución carezca de deuda a pesar de la crisis supone una "muy buena noticia".

La parte de la extra de hace cuatro años es precisamente la partida que evita que el presupuesto de este año sea inferior al anterior, ya que la cifra global de 116,3 millones de euros es un 0,11% superior a la de 2015, pero sin la paga que fue suprimida a los funcionarios en realidad y que se abonará este mes y en septiembre, sería un 2% menor. Para Abalde, los presupuestos de este año, que se aprobarán este mes a causa de la realización de las elecciones el pasado diciembre, son "equilibrados" y garantizarán el desarrollo de la actividad docente con "normalidad".

También destacó el rector el mantenimiento de la plantilla de la Universidad a pesar de la situación de crisis y la promoción del personal, tanto docente como de administración y servicios. Otro dato destacable, según Abalde, es la dedicación de 1,9 millones de euros a todo tipo de ayudas a los estudiantes a pesar de las dificultades económicas, ya que esta cantidad se reparte entre becas, premios, bonos de transporte, estancias en el extranjero y auxilios para aquellos alumnos con dificultades para terminar sus estudios.

El presupuesto de 2016 contiene una partida para equipamiento de la futura residencia de estudiantes que se instalará en el colegio Calvo Sotelo, pero el rector advirtió que todavía se está redactando el proyecto de reforma del edificio, por lo que las obras se desarrollarán durante el próximo curso. Abalde garantizó, no obstante, que en el momento en que la residencia esté terminada será ocupada por los alumnos. Domingo Calvo destacó por su parte que la internacionalización de la Universidad será su "apuesta más firme", para lo que se servirá de la actividad de sus centros tecnológicos.