La Concejalía de Medio Ambiente inspeccionará la canalización del arroyo de los Judíos, un cauce antiguo que discurría desde el alto de la ronda de Nelle hasta el puerto. Reconvertido en receptor de pluviales, su desembocadura está en A Palloza, donde se han detectado vertidos ocasionales. El Concello supone que alguna de las edificaciones que hay a lo largo del curso puede tener conectada con él su red de fecales.

La empresa contratada por el Concello revisará todo el recorrido del arroyo, entre el Puerto y la confluencia de la calle Vizcaya con la calle Asturias, en el barrio de Os Mallos. Se hará un seguimiento de todo el trazado, con cámaras submarinas que graben el trayecto canalizado a través de los registros del alcantarillado.

Según el pliego técnico del concurso, licitado en 4.986,66 euros, la inspección habrá que hacerla en días no lluviosos, con el fin de que el colector de pluviales tenga la mínima cantidad de aporte de agua y así poder identificar los aportes accidentales de fecales existentes.

Una vez localizados, el área de Medio Ambiente procederá a requerir a los propietarios de dichos edificios que subsanen las deficiencias. Hay tres zonas principales de inspección señalizadas. La primera, 375 metros en suelo portuario, entre la esquina del muelle de A Palloza y la avenida del Ejército, frente a la fábrica de Tabacos.

La segunda parte, la principal, tiene 750 metros y comienza en Tabacos para seguir por Cuatro Caminos, San Pedro de Mezonzo, la calle Naturalista Víctor López Seoane y llegar a la calle Vizcaya.

Hay además dos ramales secundarios con 445 metros, líneas paralelas al colector principal que discurren por Concepción Arenal, plaza de Cuatro Caminos, Enrique Hervada, Félix Estrada y calle Asturias. Está previsto que el trabajo finalice en un mes, dependiendo de las condiciones meteorológicas.