Xesús Manuel Pazos se dedica a la docencia desde hace 42 años. Es el orientador del Colegio de Educación Infantil y Primaria Raquel Camacho, en Os Mariñeiros, donde el 20% de los alumnos son inmigrantes. "En esa cifra no están incluidos los que tienen doble nacionalidad", puntualiza Pazos. El orientador explica que en cuanto un alumno nuevo llega al centro, es frecuente que lo hagan con el curso empezado, se pone en marcha un Plan de Acollida. Tras una primera valoración, le asignan un curso. El principal problema de los menores y de sus familias es el desconocimiento del idioma, a excepción de los hispanoamericanos, quienes sufren los denominados "desfases curriculares" porque los niveles de estudios no se corresponden con los de España. "La implicación de las familias es esencial y no siempre la encuentras. Las casas deben ser una extensión de la escuela. Es habitual que los niños aprendan y que los padres lleven aquí diez años y aún no sepan el idioma", asegura. El colegio dispone de apoyo específico para los alumnos inmigrantes y los que más lo necesitan también son derivados a la escuela de la UAMI, que está en contacto permanente con el centro. "Mejoran mucho porque se les hace un seguimiento personalizado y los de Primaria van cuatro horas semanales", destaca Pazos, quien subraya que lo esencial es que los estudiantes alcancen la media de sus compañeros. "En clase no pueden ser sillas o mesas", sentencia.