El medidor de partículas de Os Castros registró durante el año pasado dos puntos en los que las emisiones superaron el máximo permitido, según los datos facilitados por el Instituto Universitario de Medio Ambiente de la Universidade da Coruña, que estudia desde 2007 estos registros, en virtud de un convenio firmado con el Concello. El informe de 2015 especifica que se recogieron en esta estación cercana al puerto 328 muestras -ninguna de ellas en el mes de mayo-. Eso implica una cobertura del 90% del año, cuando en 2014 había sido de 263 muestras, el 72% del ejercicio. Según consta en las conclusiones del estudio, el 2015 fue el mejor año en cuanto a emisiones de partículas desde que se inició el trabajo en 2007, solo con la excepción del ejercicio de 2013, cuando no se registró ningún día en el que se superase el máximo establecido en la normativa.

El valor promedio de este año fue de 20 microgramos por metro cúbico, justo la mitad del límite marcado. El valor máximo diario se eleva hasta los 50 microgramos por metro cúbico. Esa cifra se superó en dos ocasiones, en abril y en noviembre. Si bien hubo días en los que las emisiones llegaron a los 57 microgramos por metro cúbico, se registraron también valores mínimos en el mes de marzo, de entre tres y cinco microgramos por metro cúbico.

El equipo de estudio analiza también la "granulometría" de las partículas que hay en el aire, de modo que calcula su diámetro para calcular sus efectos sanitarios. Las llamadas PM10 -que tienen menos de diez micrones de diámetro- que pueden proceder, por ejemplo, de polvo de caminos, tuvieron sus registros más altos en los meses de marzo, abril, junio, noviembre y diciembre, debido a que llovió menos que en otros meses.

Al igual que la lluvia es un factor determinante para las partículas que hay en el aire, también lo es el fin de semana. Según el estudio realizado por el Instituto Universitario de Medio Ambiente, la emisión de partículas PM10 bajó un 4%. Este informe se fija también en otras partículas más pequeñas que las PM10 y concluye que hay varias fuentes de emisión de estos materiales y que no hay ningún patrón horario común que explique la emisión de las partículas.

"Existen diferentes fuentes posibles de emisión de materia particulada a la atmósfera con influencia en el punto de muestreo y/o las fuentes que las emiten no lo hacen de una manera continua", explican los investigadores.

Desde el Instituto Universitario de Medio Ambiente concluyen que sería necesario un estudio más exhaustivo de los datos para poder saber cuáles son las fuentes que emiten estas partículas.