La ausencia del alcalde, Xulio Ferreiro, en la Función del Voto, la tradicional misa que agradece a la virgen del Rosario su intercesión por los coruñeses en la batalla de 1589 contra los ingleses, no ha sentado bien entre PP y PSOE, los dos partidos que enviaron a alguno de sus ediles al acto litúrgico.

El exalcalde del PSOE, Javier Losada, reprochó ayer a Ferreiro, a través de una publicación en la red social Facebook, que haya roto con una tradición que se venía manteniendo ininterrumpidamente desde hace más de 400 años. "Una ciudad que deja de resaltar sus hitos, los minimiza, tergiversa, se inventa la importancia de unos o disminuye la de otros acaba sin comprender su posición y la de sus vecinos en la historia, y termina desdibujando su imagen en el mundo", afirmó Losada.

La entrada, que contó con el respaldo de la actual concejal socialista Mar Barcón, también fue comentada por la histórica edil socialista, Carmen Marón, quien destaco que las creencias religiosas "no son obligatorias pero el respeto es fundamental". Quien mostró sus discrepancias con la línea oficial del partido fue el número 10 de la lista en las últimas municipales, Francisco Dinís Díaz, quien reprochó a los suyos que si el regidor debe asistir a la Función del Voto "espero que aplaudamos cuando la Báñez -en alusión a la Ministra de Trabajo- vaya al Rocío a pedirle empleo a la virgen, por coherencia más que nada".

También la concejal del PP Luisa Cid reprochó en Twitter la ausencia de Ferreiro, al entender que, al margen de ser un acto religioso, "se trata de una tradición". "El deus ex machina se superó hace tiempo", asegura.

Ferreiro defendió ayer su voluntad de defender la "neutralidad religiosa" del Concello como institución de un Estado constitucionalmente aconfesional. "No queremos que nadie se sienta ofendido, simplemente creemos que cada institución tiene su lugar", afirmó tras recordar que el próximo fin de semana se celebrará un homenaje civil a los coruñeses que participaron en aquella batalla.