La memoria de 2015 de la Policía Local refleja que un 13% de las detenciones practicadas por el cuerpo municipal se hicieron por asuntos de violencia de género, un total de 23, y un 18% se debieron a robos con fuerza o violencia. El número total de arrestados cayó de 141 a 123. Los responsables del departamento se marcan como objetivos para el próximo año el refuerzo de la policía de barrio y la mejora de la comunicación con otras Fuerzas y Cuerpos del Estado. En este sentido, el Concello tiene pendiente todavía la reunión semestral de la Junta Local de Seguridad, que debe reunirse en breve ante una fecha como San Juan y, posteriormente, por la llegada de la Tall Ships Races y los festejos de María Pita.

Las personas detenidas por la Policía Local por robo con fuerza o violencia fueron 26 (31 en 2014, año de la oleada de este tipo de delitos en la ciudad). Nueve de ellas se localizaron en el primer trimestre del año, seis en el segundo, tres en los meses de verano y ocho en los últimos tres. Hubo además cinco por hurtos y uno por allanamiento de morada.

Los detenidos por atentado o resistencia a la autoridad fueron 23, según consta en la memoria de 2015 de la Policía Local. Por violencia de género, otros 23, los mismos que el año anterior, a lo que hay que añadir cuatro por malos tratos en el ámbito familiar. Cayeron a menos de la mitad, el número de detenidos por delitos contra la seguridad vial: en 2013 fueron 13, en 2014 fueron 19 y en 2015 fueron 8. Las agresiones entre particulares motivaron seis detenciones por parte del 092.

En cuanto a los 232 atestados, informes judiciales y comparecencias ante la Policía Nacional, registrados en 2015, casi dos de cada diez fueron levantados por hurtos (42), además de los 27 por robos con fuerza o violencia. Destacan además los 12 informes causadas por lesiones achacadas a perros y una más por un perro de raza potencialmente peligrosa. Otros doce por personas que ejercían de aparcacoches irregularmente y ninguna por venta ambulante y mendicidad en cruces. Los agentes municipales localizaron a 14 personas en busca y captura o reclamadas por el juzgado.

La memoria de la Policía Local recoge además 146 intervenciones por incendios, un 40% en viviendas. Son 59, a las que se suman 22 actuaciones en contenedores y papeleas y 24 en monte o matorrales, diez en locales comerciales y 8 en vehículos. Las intervenciones por inundaciones fueron 87, un total de 37 correspondientes a locales comerciales, según figura en el documento.

En cuanto a los 521 procedimientos administrativos, un total de 159 se abrieron por portar o consumir drogas en un espacio público, el mayor número seguido de los 87 que se tuvieron que abordar al hallar a personas portando un arma blanca. Fueron 81 por venta en cruces y 59 por ejercer de aparcacoches. Por originar desórdenes graves en la vía pública, espacios o establecimientos y alterar la seguridad colectiva, se incoaron 41 procedimientos.

Objetivos y debes

Los responsables de la Policía Local se fijan como objetivos principales de 2016 el refuerzo e incremento de la cobertura de la policía de barrio, el refuerzo de la coordinación con el resto de cuerpos policiales y servicios de emergencias, aumentar la labor de prevención de "conductas insolidarias y vigilancia de las normas de circulación" y, finalmente, la implantación de herramientas informáticas específicas "para la gestión de los datos referidos a las actuaciones policiales", algo que tiene como objetivo mejorar la organización interna y las actividades que se realizan.

Al margen de la memoria, la Policía Local tiene varios asuntos pendientes que quedaron sin resolver del mandato anterior y que aún no se han abordado. Por ejemplo, la elaboración del reglamento del cuerpo, cuya redacción se inició por parte del Ejecutivo anterior pero quedó paralizada en 2013, sin que se hayan producido avances al respecto con el nuevo Ejecutivo. El presidente de la Asociación Profesional de Policía indicó, en el balance anual realizado en este periódico, que han quedado sin sumar las retribuciones salariales acordadas en 2009 y cuya inaplicación causó una huelga de bolígrafos caídos en el primer cuatrimestre del año electoral. Manuel Aceña espera que esto se solucione "a lo largo del próximo año". Además, el jefe de Policía Local sigue ocupando el cargo de forma accidental. Pendiente también la primera reunión de la Junta Local de Seguridad, que según la normativa tiene que reunirse como mínimo una vez cada semestre, algo que todavía no se ha hecho y que tendrá que realizarse ante citas masivas como el San Juan coruñés.