Las cooperativas del ofimático mantendrán una reunión el próximo miércoles con el Concello para solicitarle que agilice las gestiones para que los edificios puedan lograr su licencia de primera ocupación. El portavoz de la cooperativa A Carnocha, Luciano Ron, asegura que su promoción está ya "lista", a falta de los "últimos retoques". De hecho, el plazo de ejecución finalizará mañana.

En esta promoción están involucradas 25 familias "con recursos muy humildes" que solicitarán al Gobierno local que, en dos o tres meses puedan entrar a vivir ya en sus nuevas casas. De lo contrario, los propietarios de las viviendas se encontrarían "con graves problemas económicos". Y es que, según explica Luciano Ron, desde que se finaliza la obra hasta que los propietarios consiguen la licencia de primera ocupación, tienen que hacer frente a "entre 6.000 y 8.000 euros mensuales de intereses del préstamo de promoción", ya que el crédito no cambia de condiciones y pasa a ser hipotecario hasta que los dueños tienen permiso para habitar los inmuebles.

La promoción de A Carnocha es la que está más avanzada. "Vamos a pedir plazos y también les vamos a preguntar cuál es su estrategia de cara a la reanudación de las obras de urbanización", explica Luciano Ron. Una vez que los propietarios reciban la obra tendrán que solicitar el certificado de fin de obra, un documento que no les entregarán hasta que tengan acceso a servicios básicos, como la luz, el agua o el saneamiento, que son responsabilidad del Concello.

"Estamos apurando al Concello para que nos dé esos servicios, porque estamos al límite de nuestras posibilidades económicas", comenta Ron, ya que, una vez que las viviendas estén terminadas tendrán que ponerles seguridad durante 24 horas para evitar la okupación de sus viviendas, robos de material o desperfectos. Tendrán que hacerle un seguro al edificio y también, dependiendo de cada caso, seguir pagando los alquileres de sus casas.

Solicitarán al Concello que busque la fórmula legal más rápida para concluir el proceso. "Nos dijeron que se podría hacer por un trámite de urgencia y seguridad", según comenta Luciano Ron. De este modo, el Concello haría "una pequeña obra" para darles los servicios de "luz, agua, alcantarillado y también de acceso" para que los propietarios puedan acceder a la licencia de primera ocupación. Ron calcula que, esos trabajos, podrían desarrollarse en dos o tres meses. Pone sobre la mesa también la posibilidad de que la licencia sea provisional, pero que les permita trasladarse.

En una situación similar se encuentra otra cooperativa, con 75 viviendas, que está a punto de rematar las obras y que carece también de los servicios que le darían acceso a la licencia de primera ocupación.

Un poco más retrasados van los trabajos del primer edificio de la cooperativa Cofuncovi. Su plazo de ejecución de obra se termina a finales de año. El otro inmueble, según explica el portavoz de la cooperativa, José Ramón Mosquera, está a punto de firmar el crédito, ya que "los bancos están más flexibles".

"Esperemos que el alcalde [Xulio Ferreiro] pueda aclararnos un poco más", dice Mosquera, que recuerda que es un "compromiso en campaña electoral" de Marea Atlántica facilitar que los cooperativistas puedan entrar a vivir en sus casas.

El principal escollo que tienen en el camino es que el contrato de las obras de urbanización del parque ofimático está anulado. Así lo decidió el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), en una sentencia de finales del año pasado. El contrato, de 42 millones de euros adjudicado a Acciona, fue firmado un mes antes de las elecciones municipales que perdió el entonces alcalde socialista Javier Losada y, la dirección de obra, fue adjudicada el día anterior a los comicios, en plena jornada de reflexión. Contra la sentencia no cabe recurso, por lo que el Concello deberá volver a sacar a concurso el área del ofimático que resta por urbanizar.

Hace dos semanas, el Concello mantuvo una reunión con los promotores privados y la Xunta -que es propietaria de un 80% del suelo- para ver "cómo se cumple la sentencia" y se abre la "nueva contratación", según explica el portavoz de la asociación Ofimático 2010, Juan José Yáñez.

El objetivo es "agilizar al máximo" el proceso, aunque asegura que es complejo, ya que hay que definir cómo liquidar el contrato con Acciona.