El restablecimiento del tráfico en la superficie de la Marina, exigido por un grupo de vecinos y comerciantes del centro de la ciudad como zona 30, no se llevará a cabo, según manifestó ayer el alcalde, Xulio Ferreiro. Aunque admitió que la regulación circulatoria aplicada tras la apertura del túnel, prevista ya por el anterior Gobierno local, puede tener "fallos", el regidor destacó que la explanada creada en la Marina es un "espacio ganado para la gente", por lo que a su juicio "no sería bueno" recuperar el paso de vehículos.

Ferreiro anunció sin embargo que el Gobierno local dialogará para que los problemas que aprecian los vecinos "se resuelvan sin tener que abrir de nuevo el tráfico" en la Marina y destacó que "todas las ciudades avanzadas caminan en este sentido".

Los promotores de esta petición, que recogen firmas en la zona centro para entregarlas en el Ayuntamiento, aseguran que no pueden desplazar a familiares de edad avanzada hasta sus domicilios y que sus clientes no pueden acercarse hasta ellos. También consideran perjudicial para el turismo que no se pueda circular por la Marina y proponen que los vehículos pasen a una velocidad máxima de 20 o 30 kilómetros por hora si se recupera el tráfico en la superficie.

Para estos ciudadanos, la recuperación del tráfico en la Marina no supondrá un peligro para los peatones porque los vehículos circularían a una velocidad baja y, además, los policías locales encargados ahora de impedir el paso podrían dedicarse a vigilar que no se supere el límite establecido. Como ejemplo de la posibilidad de mantener la circulación con la ausencia de aceras, estas personas recuerdan que el tramo inicial de San Andrés tiene estas características y que nadie ha exigido la supresión del tráfico.

La asociación comercial del centro, Zona Obelisco, se mantiene al margen de esta petición, según explicó su presidente, Antonio Amor, puesto que la encuesta realizada entre los integrantes del colectivo refleja que por el momento no se aprecian efectos positivos ni negativos en la eliminación del tráfico. La mayoría de los comerciantes, según Amor, están a la espera del resultado de la campaña de ventas del próximo verano, que esperan buena ante la posibilidad de paseo que ofrece la nueva área peatonal.