"Aquí se vivió muy bien, ahora ya no tan bien", cree Santiago González, que conoce As Xubias desde 1973, cuando se instaló. Quiere servicios, quiere reformas, pero "depende de cómo se hagan". "El dinero que se gaste, que se invierta bien, por el beneficio del barrio, no de cualquier manera. El autobús no llega, aparcar es muy difícil y por aquí vienen muchos coches de fuera. Un carril bici... a ver por dónde discurre", dice González en el umbral de un pequeño taller frente a A Toquera, donde él y su amigo Juan hacen manualidades, tallan figuras de madera o embarcaciones "por diversión".