"Nos cayó el tema de los refugiados, que todos sabíamos que iba a caer. Si no era ése, era toros o terrorismo, pero uno ya había caído en Madrid, por eso no nos lo preguntaron. La mayoría escogimos la otra opción, la B, que era escribir un texto sobre el comportamiento emocional de los jóvenes. El de los refugiados era más difícil. El tiempo fue un poco justo, pero nos fue bastante bien, casi todos nos esperábamos que fuese más difícil".