-¿Cuáles son los objetivos que tiene para la federación en este nuevo mandato?

-Afronto el mandato con ilusión y con una unión muy importante. Es una época de cambios, de seguir evolucionando y eso es lo que nos proponemos. La FUCC representamos al 95% del comercio coruñés.

-¿Qué proyectos tienen en mente?

-Vamos a realizar proyectos durante todo el año, tenemos muchas ideas, así que vamos a seleccionar las que hacemos.

-¿Cuáles son los principales problemas a los que se enfrenta el pequeño comercio en A Coruña?

-Estamos saliendo de una crisis y ahora hay una incertidumbre política que no se sabe quién manda. A parte de todo eso, nosotros estamos intentando remontar el consumo. Desgraciadamente, en A Coruña, vamos a la cola. Nos encontramos, además, con problemas burocráticos y con falta de apoyo institucional. Hay voluntad, pero no plasmada. Muchas veces, el Ayuntamiento nos dice que nos apoya pero no sabemos cómo, porque hacen acciones que son lo contrario a lo que nos dicen.

-¿Qué tipo de acciones contrarias a sus intereses realiza el Ayuntamiento?

-Teníamos grandes proyectos para la ciudad y se han mermado. Hemos visto muchas campañas para las que nosotros incluso habíamos dado la idea y que empezaban siendo una cosa y acababan siendo otra diferente. No se han hecho campañas durante este año de promoción, bien sea por los presupuestos, por las peleas... Por lo que fuese, pasamos medio año con la ciudad paralizada. Nuestra labor es empezar a hacer cosas para poder dinamizar el comercio, que la gente salga a la calle y que se dé cuenta de que el comercio es la vida de sus calles. Es importante para nosotros que haya turismo, tenemos que cuidarlo. El Ayuntamiento en estos meses pocas más acciones hizo que los carnavales y las navidades. La gente se iba de A Coruña para ayuntamientos limítrofes y tenemos que conseguir el efecto contrario. Vamos a contracorriente.

-¿Qué proyectos han visto mermados?

-La Tall Ships Races. Habíamos programado actividades en O Parrote y en los barrios. Primero, el Ayuntamiento nos dijo que podíamos poner lo que quisiéramos en O Parrote y, el otro día, nos dijo que no, que ahí no se podía hacer nada por motivos de seguridad. Habíamos programado un bus turístico gratuito para que los visitantes fuesen a conocer los barrios y tampoco sabemos si lo vamos a poder poner. Nos han dado un caramelo y nos lo han quitado.

-Pero si solo cancelan las actividades en O Parrote, pueden todavía hacer las de los barrios y si es por seguridad...

-Decir que es por motivos de seguridad es como decir que no se puede hacer por si llueve. No nos presentaron ningún informe y nosotros teníamos un plan de viabilidad.

-En San Juan está previsto que vengan muchos visitantes, como todos los años, ¿no lo notará el comercio?

-San Juan se quedó reducido a una polémica. Es una pena, porque empezaba a ser valorado. Era un bien de interés turístico y ahora poca gente sabe lo qué hay. Poco más que ir a hacer una hoguera o una sardiñada a la playa. Ahora mismo no hay mucho más.

-¿A qué se refiere con que ahora la gente no sabe lo que hay?

-A que antes había una promoción, con un tiempo y unas formas. Había más actividades y ahora no vemos ideas que puedan beneficiar a la ciudad.