El proyecto de la reforma de la avenida Alfonso Molina que el Ministerio de Fomento planteó al Gobierno local a finales del pasado mes de abril, que el alcalde, Xulio Ferreiro, acogió favorablemente al reflejar un punto de acuerdo respecto al número de carriles (seis de entrada y cinco de salida en el enlace con la AP-9 y cuatro por sentido entre el edificio Proa y Ponte da Pedra), suscita dos meses después la aceptación plena del Ejecutivo de Marea. Fuentes municipales resaltan ahora que la propuesta estatal cumple las expectativas del Concello porque evita convertir el vial en "una autopista que cruza los barrios" de su entorno, "mejora la movilidad" y "humaniza la zona".

Fomento remitió al Ayuntamiento el plano final del proyecto de la llamada "alternativa de integración" este jueves a las diez de la noche, un dibujo prácticamente idéntico al enviado en el mes de abril, que adelantó entonces LA OPINIÓN. El Gobierno local afirmó en abril que estaba "muy cerca" de alcanzar un entendimiento total, aunque reclamaba "un último esfuerzo" en torno al núcleo de San Vicente de Elviña, que se trataría en una reunión posterior.

El plano definitivo no recoge nuevas actuaciones en esta zona y señala como novedad que la velocidad máxima en todo el trayecto reformado será de 70 kilómetros por hora en lugar de los 80 permitidos en la actualidad. Los conductores tendrán que reducir a 50 kilómetros por hora en los carriles de incorporación o salida en las zonas de Ponte da Pedra, el edificio Proa para el acceso a Pocomaco, la nueva incorporación al parque ofimático en sentido entrada en la ciudad, el desvío hacia A Zapateira y la entrada en Lavedra desde la salida del colegio Maristas.

La propuesta de Fomento aceptada por el Gobierno de Marea también supondrá un crecimiento de la inversión, según apuntan fuentes municipales, aunque no señalan la cuantía final. El proyecto inicial, de unos 10 millones de euros, lo financiará la concesionaria de la autopista, Audasa, junto a obras en Santiago y Vigo a cambio de una subida adicional de los peajes del 1,5% durante veinte años.

Es intención del Gobierno estatal licitar la obra este mismo año, según expusieron técnicos de Fomento desde finales del año pasado en las reuniones con las delegaciones municipales en Madrid, si bien ninguna parte ha adelantado previsiones respecto a la ejecución del proyecto ni a los plazos.

La propuesta obligará a los conductores a prestar más atención a la configuración de los carriles, sobre todo en los enlaces con la AP-9, donde la ampliación a seis y cinco evitará tener que hacer trenzados en la conducción a quienes habitualmente tienen que incorporarse hacia diferentes zonas de la ciudad. Habrá una nueva parada de autobús a la altura de San Vicente de Elviña y más espacio para peatones, según resaltan desde el Concello.

El grupo municipal del PP urgió ayer al Gobierno local a aceptar la propuesta del Ministerio sin conocer que el alcalde estaba de acuerdo con el proyecto. Los populares advierten en la alternativa integradora de Fomento una iniciativa que choca con las intenciones originales del equipo de Marea, por lo que instan a Ferreiro a "que no pierda más tiempo" y "no ponga en peligro esta inversión", de la que señalan que "llega casi un año tarde".