Las imágenes de la grabación realizada por Antena 3 Televisión sobre el suceso ocurrido en la playa del Orzán el pasado 24 de junio, que el Cuerpo Nacional de Policía envió al juzgado que investiga los hechos, reflejan una versión diferente de lo sucedido con relación a la facilitada por la Policía Local. El joven de 21 años identificado mediante las iniciales D.S.V. se introdujo en el mar a las 08.00 horas de ese día y dio origen a un incidente que motivó su detención por los agentes municipales, quienes le atribuyeron los delitos de desobediencia grave a la autoridad y desorden público.

La filmación comienza con los policías locales en el agua y, junto a ellos, el joven, quien consigue salir del mar por sus propios medios, aunque se aprecia como uno de los agentes tiene serias dificultades para hacerlo, por lo que su compañero le agarra para evitar ser arrastrado por las olas. Cuando ambos están a punto de llegar a la arena, uno de ellos cae, por lo que D.S.V. vuelve al agua para auxiliarle. En ese momento algunas de las personas presentes se acercan para ayudarles, pero la fuerza de las olas les tira y solo consiguen salir del agua con mucha dificultad.

El policía es arrastrado por la arena por quienes le prestan ayuda, que llegan a hacer una cadena humana sobre la playa, mientras el joven es uno de los que asisten más de cerca, hasta el punto de que un plano corto puede apreciarse que le sujeta con firmeza para evitar que sea arrebatado de nuevo por el oleaje. Cuando el agente es puesto a salvo, el jefe de la Policía Local, José Antonio Brandariz, se dirige a uno de sus subordinados y le señala al joven, que a los pocos segundos es detenido por el propio mando policial y ese agente, que le pone las esposas. Los tres suben las escaleras de acceso a la playa y se encaminan hacia un vehículo de la Policía Local, en el que le conducen a la comisaría.

La información facilitada posteriormente por este cuerpo fue que dos agentes se lanzaron al agua para rescatar al joven, aunque en las imágenes se ve que solo uno de ellos está entre las olas y que el otro trata de ayudarle para salir. El informe de la Policía Local acusó a D.S.V. de haber dificultado su rescate con actitudes como la de hacerse el muerto, aunque la grabación solo refleja como trata de abandonar el mar y lo hace sin ayuda.

También señaló la Policía Local que el joven solo pudo salir del agua gracias a la cadena humana que se organizó, pero este sistema solo se empleó para evitar que el policía en problemas fuera engullido por las olas, mientras que el luego detenido colaboraba en esta labor.

Todos estos hechos llevaron al Cuerpo Nacional de Policía a elaborar un informe sobre los hechos en el que se estima que D.S.V. no es, a su juicio, responsable de ningún hecho delictivo, puesto que en ningún momento se resistió a los agentes municipales y, además, la prohibición de bañarse solo fue establecida para ese día mediante un bando del alcalde, por lo que su incumplimiento sería una simple infracción administrativa. Según el 091, no había motivos para su detención.