La CIG entregó ayer en el Rexistro municipal las alegaciones a la Renta Social Municipal que pondrá en marcha el Concello, actualmente en fase de alegaciones. Entre otras medidas, la central sindical reclama que se tanto la referencia para conceder las ayudas como la cuantía del subsidio asciendan a 655,20 euros -correspondientes al salario mínimo interprofesional (SMI)- y no a los 532,21 euros que contempla actualmente el texto, correspondientes al Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem).

La CIG exige que se dote a este programa de más presupuesto, para que la falta de dinero no suponga un motivo de denegación de la ayuda. El Concello la dota este año con 2,1 millones, el dinero que prevé gastar desde mayo, cuando aprobó el presupuesto, hasta diciembre. El sindicato también pide que se amplíe el concepto de unidad de convivencia, para que contemple a diferentes personas que puedan vivir juntas en la misma vivienda por situaciones de pobreza.