A falta de que la Xunta concrete por escrito esta semana los requisitos técnicos del centro de atención primaria del Sergas que se instalará en el nuevo mercado de Santa Lucía, la Consellería de Sanidade ya ha adelantado al Concello alguna de sus peticiones: que el espacio asignado sea lo más horizontal posible y que cuente con pocas alturas y áreas amplias.

El objetivo de esta petición, según trasladó el conselleiro Jesús Vázquez Almuíña, es garantizar "la accesibilidad a pacientes y profesionales" y el movimiento dentro del centro, que solicitan que tenga, si es posible, un único piso. A falta de que el Gobierno local analice las exigencias de la Xunta y trate de darles un encaje, lo cierto es que el diseño puesto hasta ahora sobre la mesa por el Concello dista bastante de esta petición. Desde María Pita prevén levantar en un lateral del nuevo mercado una especie de torre -con dos pisos bajo tierra y otros cinco sobre la línea de superficie- en la que se ubicaría el centro de atención sanitaria.

El diseño inicial del Concello, sin embargo, no es aún definitivo. "Ahora nuestros arquitectos tendrán que compatibilizar nuestro proyecto, que pretende ir más allá de un espacio para comprar productos y convertirse en un lugar de encuentro, e incorporar este servicio", señaló ayer el alcalde, Xulio Ferreiro, que el martes se reunió con el conselleiro.

El proyecto para el nuevo mercado de Santa Lucía que tiene en mente el Gobierno local pretende ampliar el espacio de la entrada a la zona del mercado, dando continuidad a una planta baja que sería "completamente permeable". "De esta forma, el edificio que albergará el mercado se parecerá más a una plaza cubierta que a un contenedor cerrado", señalan los técnicos municipales.

El proyecto para la reforma del mercado de Santa Lucía lleva meses atascado. El Concello quiere que no se demore mucho más allá del verano y que se llegue a la precampaña para las autonómicas con un convenio firmado, que suponga un compromiso en firme que no pueda echar atrás el próximo Gobierno autonómico, sea cual sea el resultado electoral. El proceso se ha encasquillado en la elaboración del anteproyecto, un marco técnico en el que, por ejemplo, se ha de definir qué espacios ocupará cada uno de los usos, las alturas o el número de consultas que deberá haber en el centro de atención sanitaria. Desde el Ayuntamiento advierten de que las alternativas municipales están en la mesa de los técnicos autonómicos desde principios de año y en la Xunta, que no consignó ninguna partida este ejercicio para el plan, aseguran que están analizando dichas propuestas.

Sí indicó Ferreiro que en la reunión del martes Vázquez Almuíña se comprometió a dotar a este centro de las partidas suficientes en los próximos presupuestos de la Xunta de 2017, siempre y cuando los populares continúen al frente del Gobierno autonómico después de los comicios de otoño. "La idea es comenzar las obras el año que viene. Tenemos todo preparado para edificar pero estamos esperando por la Xunta. En las últimas semanas las cosas se ralentizaron", señaló el alcalde.

En las últimas semanas el Concello había acusado a la Xunta de plantar a los técnicos municipales en dos reuniones convocadas para avanzar en las negociaciones para perfilar el proyecto. El Concello ya modificó a finales del pasado año, con el acuerdo unánime del pleno, el planeamiento urbanístico vigente, cambiando el uso del mercado de Santa Lucía de abastecimiento a contingencia, de forma que se permitirán más actividades en las instalaciones, además de la comercial.

El proyecto de reforma de Santa Lucía es una de las patatas calientes de la Concejalía de Emprego e Economía Social, si bien el Gobierno aspira a trascender la condición de espacio comercial del mercado, convirtiéndolo en una instalación con servicios municipales y de la Xunta. En el caso del centro del Sergas, se busca descongestionar el centro de salud de Federico Tapia .